Silva, procesado en julio de 2014 y destituido por ASSE en 2015, había sido acusado ante la Justicia por directores de hospitales que dijeron haber sido presionados a contratar el servicio de la asociación civil
«Tanto el asesoramiento previo como posterior a la constitución de Buena Estrella —extremo sobre el cual declararon numerosos testigos— realizado por Silva, demuestra una connivencia con la asociación, cuando su calidad de director de ASSE le impedía intervenir de cualquier manera en una empresa que iba a contratar con el organismo», dice la sentencia de la jueza.
Por otra parte, también fue condenado el otro procesado por esta trama de corrupción, el exintegrante de la Federación de Funcionarios de Salud Pública, Hebert Tejeira, conocida como «Toshiba». En su caso la condena fue por el delito de tráfico de influencia.