En medio de una jornada distendida, con asado, juegos y hasta festejo incluido por los 32 años de Fernando Muslera, la delegación uruguaya recibió una amonestación de FIFA luego del debut con triunfo 1-0 sobre Egipto.
En principio se temió por algún tipo de investigación por una actitud de Luis Suárez, quien en el festejo del gol da la sensación de darle un golpe en el brazo a un rival. Sin embargo, no fue así. Entre otras cosas porque todo depende del ángulo con el que se haya hecho la toma. Suárez parece más que nada hacer un gesto para alentar a otros jugadores a que se sumen al festejo. De cualquier manera, no fue por esto que se comunicó la FIFA.
Se trató de una amonestación porque el banco de suplentes, incluidos aquellos futbolistas que habían sido sustituidos, invadieron el campo de juego para celebrar el gol de José María Giménez a los 89 minutos.
Por ahora solo quedó en una advertencia, pero si se da un hecho similar habrá una sanción económica.