El Consejo de Ministros, tras una presentación del Ministerio del Interior y el de Economía y Finanzas, firmaron un convenio que establece la obligación de instalar el sistema de inhabilitación de billetes a través del entintado.
Todas las instituciones tendrán 90 días para instaurarlo, de lo contrario se las inhabilitará. La medida tiene como objetivo desalentar el robo a cajeros automáticos.
El prosecretario de la Presidencia Juan Andrés Roballo dijo que si bien el tema de los costos de la implementación del sistema no estuvo sobre la mesa esta mañana, “quienes prestan el servicio se hacen cargo” del mismo y eso incluye el los mecanismos de seguridad del cajero.
El jerarca añadió que además que «se aumentará el patrullaje en las zonas en donde se encuentren cajeros que aún no han incorporado el sistema».
Resaltó que para el gobierno «el centro de la cuestión es asegurar los mecanismos de acceso de la población al efectivo y preservar la el sistema de pagos y la disponibilidad del dinero».