Francia se consagró bicampeón Mundial tras vencer 4-2 a Croacia en el duelo decisivo llevado a cabo en el Luzhniki Stadium de Moscú, confirmando su perfil de candidato que se empezó a construir en el transcurso de la fase de grupos y que se gestó en la fase final de Rusia 2018, vigésimo primer magno torneo que llegó a su fin.
Croacia le sacó la pelota a Francia. Bloqueó con la tenencia la posibilidad de que Paul Pogba y Blaise Matuidi encontraran los caminos a los hombres de ofensiva. Un comienzo con conocimiento puro de lo que es disputar una final del magno torneo.
Sin embargo, los dirigidos por Zlatko Dalic pecaron en un aspecto determinante. Arma por excelencia de este certamen, que algunos perimieron con sus comentarios, no defraudó en el choque más importante.
Un envió a Antoine Griezmann a los 18´ fue desviada rumbo al propio pórtico por parte de Mario Mandzukic para sentenciar la apertura del marcador. Después de Inglaterra, los galos junto a los uruguayos fueron los que mejor supieron sacarle jugo.
Pero Croacia siguió de la misma manera y mediante otro balón en falta, apareció en segunda instancia la calidad de Ivan Perisic a los 28´ para establecer la paridad en el tanteador como al principio. Justicia con lo poco pero bueno que exhibieron.
Aunque cuando era el momento del representativo ajedrezado de continuar imponiendo su fútbol, apareció otra acción de la casa para Francia. A los 38´ el atacante galo con sangre uruguaya cambió penal por la segunda diana.
El sistema de videoarbitraje (VAR), otra de las sensaciones de Rusia 2018, vio en la revisión mano del autor del empate en una incidencia y el argentino Néstor Pitana fue a la pantalla para constatar que el volante de Inter asumió el riesgo de jugar con la mano la pelota.
En el arranque del segundo tiempo, los galos comenzaron a perder el sostén de la mitad de la cancha por lo que Didier Dechamps decidió acomodar el sector con altura en campo con el ingreso de Steven Nzonzi.
Y un entrenador que aspira a grandes logros debe siempre encontrar métodos para anteponerse ante las adversidades. Algunos conceptos fueron compartidos por el maestro Óscar Tabárez previo al juego de cuartos de final.
Con el hombre de Sevilla en el rectángulo, se potenció la figura de Paul Pogba quien decretó el tercero y al que acompañó Kylian Mbappé, aprovechando la media distancia como otra variante para llegar al tanteador, con un cuarto gol que liquidó el sueño croata.
Aunque nadie contaba con un descuento de manera insólita por parte de Mandzukic. Hugo Lloris no supo qué hacer cuando tuvo el esférico en sus pies y protagonizó el “blooper” de la Copa del Mundo. No hubo mucho más, sino las ganas y el espíritu de lucha de Croacia para caer de pie ante la mejor selección.
Con la segunda estrella, Francia igualó a Argentina y a Uruguay, mientras que Dechamps, ingresó en el selecto grupo de campeones como jugadores y técnicos con sus selecciones, en el que están el brasileño Mario Zagallo y el alemán Franz Anton Beckenbauer.
FINAL
FRANCIA 4-2 CROACIA
Fecha: 15 de julio. Estadio: Luzhniki Stadium, Moscú. Árbitro: Néstor Pitana (Argentina). Asistentes: Hernán Maidana y Juan Pablo Bellati (Argentina).
VAR: Massimiliano Irrati (Italia). Asistentes VAR: Mauro Vigliano (Argentina), Carlos Astroza (Chile) y Danny Makkelie (Holanda).