Este sábado se realizó la última Convención Nacional del Partido Nacional previo a las elecciones internas. En dicho marco hicieron uso de la palabra los precandidatos presidenciales Luis Lacalle Pou, Jorge Larrañaga, Verónica Alonso y Juan Andrés Ramírez Saravia, quienes fueron coincidentes en comprometerse a la unidad.
“Tengamos cuidado, extrema responsabilidad en los planteos electorales que vamos a hacer rumbo a la campaña de la interna, porque es cierto que será en un proceso de competencia entre nosotros, pero el partido quedará expuesto a algunos planteos”, advirtió Lacalle Pou.
Agregó: “Tenemos que tener un andarivel de conducta y planteos que el partido lo pueda hacer suyo. Hablando en criollo: que con tal de ganar no prometamos cualquier cosa. Porque ‘el horno no está pa’ bollos’”.
El legislador indicó que “si el uruguayo hoy está pensando en un proceso de cambio, si hay gente dolida y desilusionada y la soberbia de un gobierno ya ha dejado de mirar a los más necesitados con cara y corazón y le ha puesto cifras alejándose de los mismos, los candidatos del Partido Nacional no pueden tener derecho a no actuar con la seriedad que amerita”.
“Tenemos que construir ilusión, no ilusionismo, en base a lo que pensamos: un Uruguay de esperanza, pero siendo muy responsables en los compromisos”, remarcó.
Lacalle Pou aseguró que quiere ser candidato a presidente por el Partido Nacional, pero aseguró que si de ello depende una palabra en contra de uno de sus compañeros, entonces no merece ser candidato.
“Han metido la mano en la lata”
A su turno, el senador Jorge Larrañaga expresó que el gobierno “ha defraudado la esperanza de los uruguayos, que ha fracturado a la sociedad”.
Podría decirse que “le han mentido a los uruguayos, que han traicionado la confianza de miles, que tenemos una educación que margina y expulsa, que ha dilapidado los recursos públicos, que ha metido la mano en la lata y no se la han cortado”.
“Me parece fundamental que impulsemos un sueño, la alternativa la vamos a lograr si impulsamos un sueño, una ilusión”, indicó.
Agregó que “se necesita una ilusión, de un país con orden, con autoridad, un país con educación como escudo de los pobres y escalera de ascenso social. Se necesita un país seguro, con autoridad, respeto, valores, en donde el hijo del pobre pueda salir de la pobreza, en donde las políticas sociales incluyan y no marginen, donde el desarrollo sea auténticamente nacional. El país precisa orden”.
“Que de las urnas pueda salir una expresión que salga del corazón, pase por la mente y salga por la boca, de que se van, se van”, sentenció el parlamentario.
Alonso, por su parte, manifestó que los candidatos nacionalistas deben estar preparados para responder a los uruguayos que piden un cambio.
“Solos los blancos podemos encabezar ese cambio y no queremos un cambio traumático. Asumí la responsabilidad de ser precandidata de mi partido. Un acto de confianza en el Uruguay y en mi partido, para incorporar una nueva sensibilidad, la de las mujeres, que no está contrapuesta a nadie, y tiraremos del carro desde cualquier lugar que la gente decida”, afirmó.
Pidió elecciones internas con una “fuerte unidad partidaria”, e indicó que en el 2020 “no habrá mayorías parlamentarias, por lo que se necesitará otra forma de hacer política, no desde la soberbia ni de las mayorías mecánicas”.
Mientras que Ramírez Saravia manifestó que si Lacalle Pou gana la interna estará en la primera línea de fuego
“Me siento muy cómodo. Con mucho por hacer. Pero sin dudas las cosas se están empezando a sintonizar. Un partido con armonía y respeto es más creíble”, sentenció.
(Fuente LR21)