Los politólogos Adolfo Garcé, Mariana Pomies y Daniel Chasquetti analizaron la rendición de cuentas presentada por el Presidente Tabaré Vázquez en el Antel Arena el pasado viernes 1º de marzo.

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Chasquetti comparó con anteriores presidentes, los cuales también hacían este tipo de actos: «Lacalle iba cada 1 de marzo al Parlamento y hacía un discurso. Otros usaron la cadena. Otros enviaron informe».

Afirmó que «este gobierno tiene un nivel de desaprobación importante como nunca antes en los gobierno del Frente Amplio», por lo que sacó la conclusión de que «el acto lo veía como una chance de defender su gobierno y al Frente Amplio. Estuvo bien centrados en los 10 puntos de su campaña. Estuvo todo dentro de lo esperable. Estaba muy dinámico y lúcido mejor que las últimas apariciones».

En cuanto al ejemplo del robo a su nieto que dio el presidente para mostrar su cercanía a la inseguridad, comentó: «Cuando Vázquez utilizó el ejemplo de ponerse en el lugar de otro le permite al oyente. Hay que ser muy astuto y sagaz porque tiene que ser creíble. El ejemplo del nieto fue creíble. Fue puesto con un énfasis adecuado. No fue exagerado».

Con respecto a las repercusiones del evento, comentó: «En las redes sociales es una selva. He bloqueado a gente. Las repercusiones de lo que dijo Vázquez fue terrible. Luis Lacalle Pou no escribió, Pablo Mieres criticó y Edgardo Novick salió con pocos argumentos».

Sobre la campaña electoral expresó: «Noto que hay un movimiento orquestado para destruir a Lacalle Pou. A mi me gusta cuando le discuten sus ideas, pero cuando lo atacan por donde vive, su historia laboral, no ayuda en nada, genera un clima de venganza»

Con respecto a haber realizado el Antel Arena como sede de su acto indicó que «la política ganó un nuevo espacio. Lo van a tener que utilizar todos. Me los imagino pidiendo el Antel Arena para hacer un acto. Salimos del Palacio Peñarol y Platense.» Señaló también que «Carolina Cosse lo construyó para que Vázquez le diera la bendición. Es una lectura de la oposición».

Finalmente Chasquetti expresó ver una recuperación del Frente Amplio «desde que sacaron a Raul Sendic, va a pelear la elección», aunque remarcó que «Luis Lacalle Pou sigue siendo el favorito».

Mariana Pomies por su parte aseguró que el discurso, «de lado de la gente común fue muy largo, cargado de información difícil de digerir. Los convencidos que estaban ahí fue para darles ánimo. Él maneja bien los tiempos y las masas, es una de sus habilidades. De lado de lo no convencidos fue muy largo». Agregó que «hay distintos públicos frente al discurso. Fue un buen motivador para los convencidos».

En cuanto a la campaña electoral, señaló que «los agravios vinieron desde sus ministros. Tendría que verlo dentro de su propio partido. A la gente les molesta lo que dijo Ernesto Murro y María Julia Muñoz. Es interesante que llame a controlar y tiene que hacerlo con los ‘frentistas'».

Pomies afirmó que la confirmación de Julio María Sanguinetti el mismo día del acto de Vázquez, «fue una jugada interesante para el partido. Lo de Vázquez fue majestuoso y quedo un poco tapado».

Aseguró que «Vázquez es el más carismático de los 4 pre candidatos, aunque no es candidato. El discurso motiva a los militantes. Tiró argumentos difíciles de retener, pero defendió hechos de gobierno con números».

Indicó que «el Frente Amplio, si bien ha intentado mejorar el problema, son los desencantados». Y agregó que «hay que ver si lo que tiró Tabaré lo toma el Frente Amplio para su campaña», ya que «necesitan argumentos».

Adolfo Garcé comentó que el acto llevado a cabo por Tabaré Vázquez «fue un discurso político con el pretexto de la Rendición de Cuentas. Si tuviera que pedir un deseo es que lo hagan en el Parlamento, es la mejor manera. Vázquez hizo una cosa razonable con lo político partidario. Reunió a los militantes y dio la señal de largada».

Señaló que «sin un gobierno que se defienda y sin militantes que la defienda, el Frente Amplio no pelea la elección. Si un partido no defiende su gestión no la va a defender la oposición. Fue muy persuasivo».

Indicó que «hemos estado acostumbrados a un Vázquez poco activo en la esfera pública, no era hiperactivo en el 1er gobierno. El contraste entre Vázquez 1 y 2, es fuerte. Vamos a tener ahora un gobierno más activo tratando de tener más comunicación».

Garcé afirmó que «Vázquez no quiere que el Frente Amplio pierda y va a trabajar este año para eso».

En cuanto a la seguridad, señaló que «es muy interesante que se coloque el debate sobre las causas sobre la epidemia de homicidios. Es interesante que se discuta sobre el efecto del Código del Proceso Penal. Sobre las causas lo remito a lo que leí que escribió Diego Sanjurjo en El Observador, el CPP tiene un efecto».

Afirmó que «Vázquez se defendió aceptando que hay un problema, que no va a poder cumplir sus promesas en combatir al delito y dejó un tema para discutir.»

Si bien Garcé afirmó que no es afín a las redes sociales, comentó que «son armas de destrucción masiva. Va a ser un desastre. Son la picadora Moulinex y se usa abundantemente».

En cuanto al hacer el evento en el Antel Arena expresó que «fue mostrar que el Frente Amplio hace cosas y de pasó llevar agua para el molino de Carolina Cosse».

Finalmente Garcé señaló que «viene un gobierno más activo, Haciendo política y un Frente Amplio más activo. Saliendo de estar contra las cuerdas y buscando el centro del ring».