En Fuentes Confiables, Felisberto Buenseñor estuvo con su espacio de humor y actualidad “Aldo conmigo” donde analizó el resultado de las elecciones internas.
Más allá de lo deportivo fue una fiesta. Una fiesta democrática que vale la pena evaluarla: una evaluación certera sobre “Análisis y premios individuales de la misma”
Una vez más se comprueba mi teoría de que siempre hay más militares de los que nos imaginamos.
A Novick que no decaiga mi loco. No me gustaría que desapareciera es como el Tanque.
El premio al ganador de la noche es Luis a secas, Luis Lacalle Pou. Hizo el amor, políticamente, democráticamente y creo que corporalmente.
No solo por estar en el grupo de la muerte. Estaban nerviosísimos, cagados. Con Sartori ya todo me parece verosímil, hasta puede ser abducido por una nave espacial. Es tanto el odio a Sartori que hizo lo imposible, todos los blancos unidos.
A Luis le volvió a crecer pelo porque con el estrés de la campaña se le cayeron unos cuantos.
Premio al más contento: Talvi, se durmió con una sonrisa y abrazado a la almohada.
Premio al más triste: Larrañaga. Tuvo re triste, angustiado lo noté, un Winnie Pooh triste.
Premio al que sostuvo la burbuja hasta el final: Sartori salió con una sonrisa de oreja a oreja, lo abuchearon y sonrió.
Premio a la cara más enojada: la cara de traste la Carola Cosse, con los brazos cruzados, muy seria.
Del 1 al 10 el FA se fue intranquilo. El más tranquilo fue Bergara.
Premio al mérito y ejemplo de vida: Andrade construyó una campaña ladrillo a ladrillo
Premio a la trayectoria: Sanguinetti le podemos ganar en votos pero no en política
Premio al peor vestido: Amorín Batlle, que espantosa campera. Si te portas mal Aldo Silva te compro una de esa. Parecía un tomate cherry, notar se hizo notar.
Premio a la mejor cobertura: Radio Universal
Premio a los datos más certeros: Chelistorti, si me lo merezco, me lo merezco.