Desde las 12.30 de Madrid, se inicia la segunda audiencia en el Tribunal de Arbitraje Superior del deporte, que ahora funciona en las oficinas de «LaLiga». Se espera para hoy la voz del médico del ente sudamericano, Osvaldo Pangrazio. ¿Cuál es la postura de cada equipo?.
Redaccion de Doble Amarilla.com.ar Corresponsalía en Bs As
Segundo y último día de audiencias en las oficinas de «LaLiga», dónde por estas 48 horas funcionó el TAS y dónde se vieron las caras, con el objetivo de dirimir a quién lo asiste la razón, Boca y River.
En el día de ayer, dieron su testimonio Rodolfo D’onofrio y Daniel Angelici, presidentes de ambos equipos. A ellos los acompañaron, Ignacio Villaroel, Secretario de River y Darío Richarte, Vice de Boca, además de sus abogados, Mariano Clariá, por el lado del Xeneize y Gonzalo Mayo, del lado del club de Núñez. Hoy estarán las mismas caras, pero no declararán.
«Doble Amarilla» tuvo acceso a conocer varias de las voces que se alzaron ayer, entre los que se contaron dos actuales jugadores de Boca y a un ex jugador. Carlos Tevez, Julio Buffarini dieron su testimonio, en tanto que Pablo Pérez debió asistir ayer a las 7.30 a La Bombonera para aportar su voz.
En tanto, según pudo saber este sitio, se desistió a último momento de sumar el testimonio del chico Lamardo, otro de los damnificados por los gases, vidrios rotos del micro y piedras.
Además de los jugadores, del lado Xeneize declaró el chofer del Micro, quién sufrió de primera mano las agresiones en la esquina de Lidoro Quinteros y Libertador y los médicos del plantel: Pablo Ortega Gallo y el psicólogo Ivan Tcherkaski. ¿Y del lado de River? La declaración llegó del lado de los Empleados de Seguridad del Club. Declararon Valentina Pomi y Gabriel Martillo.
Para hoy, la declaración más fuerte que se espera es la del médico de CONMEBOL, Osvaldo Pangrazio, figura central ya que es la persona que debió certificar el estado de los jugadores de Boca y quedó envuelto en una polémica, ya que no quedó claro si pudo o no revisar a los jugadores Xeneizes.
Las posturas son claras: Boca va por todo. Quiere que River sea descalificado y obtener una compensación económica que supere los u$s 10 millones. En la primera audiencia, el Xeneize dejó en claro que responsabiliza a River por los incidentes. Del lado del «Millo» rebaten esa cuestión de responsabilidad y se las endilgan a las fallas del operativo policial de aquel fatídico sábado y que el responsable es el ministerio de Seguridad de la Ciudad.
Además, según pudo saber «Doble Amarilla», en River también se agarran mucho del pacto de caballeros que firmó Daniel Angelici en la tarde del sábado 24 de noviembre en el Monumental, ante D’onofrio y Alejandro Domínguez, presidente de la CONMEBOL.
En Núñez esgrimen que Boca firmó un pacto para postergar el encuentro y que finalmente lo jugó. «Boca firmó un acuerdo de postergar el partido, que Boca aceptó y después no respetó. Sin perjuicio de eso, no solamente no quiso jugarlo sino que después encima lo jugó. No tenemos responsabilidad, entre que Boca aceptó postergar el partido y que después aceptó jugar, sin ningún tipo de reserva ni protesta, es bastante ridículo que insistan con esa cuestión», relató a «Doble Amarilla» una alta fuente que siguió de cerca la presentación riverplatense.
Habrá que ver que ocurre hoy en las oficinas de «LaLiga», cuando se reanuden las audiencias y se conozca el testimonio de Pangrazio, entre otras voces. Hoy será el último día de audiencias y, luego, el TAS deberá fallar y decidir.
Segundo y último día de audiencias en las oficinas de «LaLiga», dónde por estas 48 horas funcionó el TAS y dónde se vieron las caras, con el objetivo de dirimir a quién lo asiste la razón, Boca y River.
En el día de ayer, dieron su testimonio Rodolfo D’onofrio y Daniel Angelici, presidentes de ambos equipos. A ellos los acompañaron, Ignacio Villaroel, Secretario de River y Darío Richarte, Vice de Boca, además de sus abogados, Mariano Clariá, por el lado del Xeneize y Gonzalo Mayo, del lado del club de Núñez. Hoy estarán las mismas caras, pero no declararán.
«Doble Amarilla» tuvo acceso a conocer varias de las voces que se alzaron ayer, entre los que se contaron dos actuales jugadores de Boca y a un ex jugador. Carlos Tevez, Julio Buffarini dieron su testimonio, en tanto que Pablo Pérez debió asistir ayer a las 7.30 a La Bombonera para aportar su voz.
En tanto, según pudo saber este sitio, se desistió a último momento de sumar el testimonio del chico Lamardo, otro de los damnificados por los gases, vidrios rotos del micro y piedras.
Además de los jugadores, del lado Xeneize declaró el chofer del Micro, quién sufrió de primera mano las agresiones en la esquina de Lidoro Quinteros y Libertador y los médicos del plantel: Pablo Ortega Gallo y el psicólogo Ivan Tcherkaski. ¿Y del lado de River? La declaración llegó del lado de los Empleados de Seguridad del Club. Declararon Valentina Pomi y Gabriel Martillo.
Para hoy, la declaración más fuerte que se espera es la del médico de CONMEBOL, Osvaldo Pangrazio, figura central ya que es la persona que debió certificar el estado de los jugadores de Boca y quedó envuelto en una polémica, ya que no quedó claro si pudo o no revisar a los jugadores Xeneizes.
Las posturas son claras: Boca va por todo. Quiere que River sea descalificado y obtener una compensación económica que supere los u$s 10 millones. En la primera audiencia, el Xeneize dejó en claro que responsabiliza a River por los incidentes. Del lado del «Millo» rebaten esa cuestión de responsabilidad y se las endilgan a las fallas del operativo policial de aquel fatídico sábado y que el responsable es el ministerio de Seguridad de la Ciudad.
Además, según pudo saber «Doble Amarilla», en River también se agarran mucho del pacto de caballeros que firmó Daniel Angelici en la tarde del sábado 24 de noviembre en el Monumental, ante D’onofrio y Alejandro Domínguez, presidente de la CONMEBOL.
En Núñez esgrimen que Boca firmó un pacto para postergar el encuentro y que finalmente lo jugó. «Boca firmó un acuerdo de postergar el partido, que Boca aceptó y después no respetó. Sin perjuicio de eso, no solamente no quiso jugarlo sino que después encima lo jugó. No tenemos responsabilidad, entre que Boca aceptó postergar el partido y que después aceptó jugar, sin ningún tipo de reserva ni protesta, es bastante ridículo que insistan con esa cuestión», relató a «Doble Amarilla» una alta fuente que siguió de cerca la presentación riverplatense.
Habrá que ver que ocurre hoy en las oficinas de «LaLiga», cuando se reanuden las audiencias y se conozca el testimonio de Pangrazio, entre otras voces. Hoy será el último día de audiencias y, luego, el TAS deberá fallar y decidir.