El comportamiento de tres sectores muy relevantes como la industria, el comercio y la construcción fue contractivo, tiene efecto en el nivel de actividad y en el mercado laboral, algo que preocupa.
La economista Sofía Tuyaré, integrante del departamento de Consultoría de Carle & Andrioli Contadores Públicos, analizó en profundidad los indicadores de estos sectores.
Aldo Silva – ¿Cómo se comportó dicho la industria según informe del Banco Central de cuentas nacionales del segundo trimestre?
Según los datos publicados por el BCU, la economía uruguaya está estancada, y dentro de los factores que incidieron fueron los magros desempeño de la construcción, la industria y el comercio.
Según el organismo la industria manufacturera continúa en caída, la actividad disminuyó 1,9% en el segundo trimestre del año respecto de mismo trimestre del año anterior. Luego de caer 2,6% en el primer trimestre.
El comportamiento de este trimestre se explica principalmente por las baja de actividad en las ramas que están orientadas al mercado interno, sobre todo la refinería de petróleo, que no puedo ser compensado por el aumento en las ramas exportadoras.
A.S. – ¿Qué otros datos nos muestran la evolución de este sector?
El Instituto Nacional de Estadística elabora el índice de volumen físico de la industria manufacturera. El índice en julio de 2019, último dato disponible, registró un incremento de 1,5% respecto de mismo mes del año anterior. Si se le excluye la refinería, según el INE el indicador sin refinería en julio disminuyó 2,3% respecto a julio de 2018.
Según el INE, la división que tuvo mayor incidencia el aumento del indicador en los últimos doce meses a julio fue “Fabricación de Papel y Productos de Papel”, lo que explica que el indicador con refinería muestre expansión.
Por el otro lado, el rubro que tuvo mayor incidencia negativa fue “Elaboración de Sustancias y Productos Químicos”. Los siguen en importancia para esta contracción las divisiones “Fabricación de Otros Equipos de Transporte” y “Industrias Metálicas Básicas”.
A.S. – ¿Cómo se comportó la construcción?
Según los datos del BCU, el nivel de actividad de la construcción registró una contracción de 4,7% en el periodo abril-junio de 2019. Esto se debe fundamentalmente a la baja en la construcción de edificios, sobre todo en Montevideo. A su vez, en el periodo también se registraron disminuciones en obras realizadas por MTOP, Antel y UTE, que fue parcialmente contrarrestado por incremento en obras de la Intendencia de Montevideo.
A.S. – Y en cuanto al comercio, ¿qué comportamiento registró en ese periodo analizado?
Según el informe del BCU, el nivel de actividad del sector comercio, reparaciones, restaurantes y hoteles tuvo un descenso de 2,6% en el segundo trimestre respecto mismo periodo del año anterior.
Para este periodo se registró caídas tanto en la actividad comercial, como los servicios de restaurante y hoteles. La explicación es la menor demanda de los hogares y de menores turistas ingresados al país y con un menor gasto.
A.S. – En materia de empleo, ¿qué nos puedes comentar respecto a la mano de obra de este escenario?
Los tres son sectores intensivos en mano de obra por lo que tiene efecto en el mercado laboral el buen o mal desempeño de estas ramas de actividad.
Según el INE, en julio de 2019, último dato disponible, el 10,1% de la población ocupada pertenecía la industria manufacturera, 7,2% a la construcción y 17,5% al comercio.
El organismo con el informe del índice de volumen físico del sector industrial, publica el Índice de Horas Trabajadas y el índice de Personal Ocupado de la industria. En julio ambos indicadores se mostraron contractivos respecto a lo registrado un año atrás. El IHT disminuyó 5,4% y el IPO bajó 3,8% para la medición interanual.
A.S. – ¿Qué expectativas hay en el sector?
Se prevé un magro desempeño para la economía global este año.
En la Encuesta Industrial que elabora la Cámara de Industrias del Uruguay, las expectativas empresariales continúan en terreno negativo, tanto si se hace referencia a la economía, a la empresa, al mercado interno o al externo.
En cambio, el Centro de Estudios Económicos de la Industria de la construcción, en su informe de setiembre, mejora las expectativas sobre el sector.
Recordemos que el anuncio de UPM generó expectativas positivas para una rama de la economía, y con el proyecto de obras la construcción y el empleo en este rubro se verán afectados positivamente. La industria, en cambio, puede verse favorecida la división que está orientada a la construcción pero no al resto de las industrias. Para el caso del comercio, el efecto en el nivel de actividad y la cantidad de los turistas genera incertidumbre.