El canciller Rodolfo Nin Novoa deslindó responsabilidad a Uruguay en la decisión que habilitó la salida del país de los tres activistas paraguayos acusados de secuestro.

Consideró improcedente el pedido de explicaciones solicitado por Paraguay, ya que Uruguay consagra la separación de poderes.

Los ciudadanos paraguayos estaban en Montevideo desde agosto a la espera de que un tribunal uruguayo y el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, se pronunciaran sobre la pertinencia de darles refugio, luego de que frustró un pedido similar realizado en Brasil.

Este fallo judicial habilitó la solicitud y permitió que los tres viajaran a Finlandia en calidad de refugiados políticos. El embajador uruguayo en Paraguay, Federico Perazza dijo a 970 Noticias que por el momento “prefiere guardar silencio sobre el tema”.