María Rosa Oña estuvo en De taquito a la mañana, y en su columna de humor dio consejos sobre todo lo que se puede hacer con la plata que se gasta en cartelería política.
“Iba a la casa de una amiga en un Uber y veo decenas, qué digo, miles de carteles en los edificios y me pregunté: ‘¿Cuánto dinero hay en cartelería en la rambla?, ¿Sabés todo lo que se puede hacer con ese dinero que gastan en carteles políticos?»
“Comprarle un cajoncito a Lacalle para que llegue a la biblioteca, una profesora de baile a Martínez para que baile con onda, un foniatra para Larrañaga, que me diga Martínez cuántos viajes a Miami», dijo.
«Se podrían terminar las calles, podemos comprar miles de GPS para los taxis que nos dicen ‘¿por dónde vamos?’, podemos comparar miles de regalos para el amigo invisible y mucho más».
«En vez de cartelería, ¿por qué no nos dan imanes? Así por lo menos los ponemos en la heladera y la decoramos…»
«¿No les parece que estamos viviendo la elección como el fútbol?», preguntó Oña. “Y ya que se viene Halloween veremos qué careta sale en esta elección».