La selección sudafricana de rugby derrotó 32-12 a Inglaterra para consagrarse campeona del mundo por tercera vez en su historia.
Si bien las tácticas de Sudáfrica fueron igual de tradicionales que su histórica camiseta verde, el equipo fue mucho más representativo de una nación multirracial que los que fueron campeones del mundo en 1995 y 2007. Además, Siya Kolisi se convirtió en el primer capitán negro en levantar la Copa Webb Ellis.
“Nunca había visto así a Sudáfrica”, dijo Kolisi antes de recibir el trofeo. “Es como en el 95. Hemos tenido muchos cambios (en el país). El entrenador nos dijo que no solamente estábamos jugando para nosotros, también para la gente que nos miraba desde su casa”.
Los ingleses sufrieron un severo contratiempo cuando Kyle Sinckler tuvo que abandonar el campo por un fuerte golpe en la cabeza.
Sudáfrica se sumó a Nueva Zelanda como tricampeón del Mundo, mientras que Inglaterra sigue siendo el único equipo del hemisferio norte que ha podido ganar el torneo en nueve ediciones.
El logro sudafricano tiene un significado especial, ya que los Springboks no pudieron jugar las primeras dos ediciones de la Copa del Mundo por las sanciones deportivas impuestas al país debido al apartheid.
Además, los Springboks se convirtieron en el primer equipo en perder un partido de la fase de grupos y después consagrarse campeones del mundo. Habían caído en el debut ante los All Blacks.
Fotos: @Springboks
Fuente: Agencia Reuters