La vicepresidenta de la República, Lucía Topolansky, no esperaba que Larrañaga fuera ministro del Interior, descartó a Sánchez para la intendencia de Montevideo, cree que la coalición usará el lema del Partido Independiente para la capital y Canelones y sigue sin saber de donde hará los recortes Arbeleche.

Contó además la historia de la foto con los líderes del Mercosur y la mano izquierda arriba, en entrevista con Fuentes Confiables.

Afirmó estar en «modo departamentales y municipales», ya pensando en las próximas elecciones.

Comentó que de la transición se «ha hecho un ‘glamour'», pero que en realidad «No pasa nada. Cuando recibimos la transición en algunos lados nos dieron las llaves. En el Palacio Legislativo se llevaron hasta los discos duros y soy benévola».

Respecto a la ley de Urgente Consideración, señaló que «no se puede mandar una ley de 400 artículos donde vamos a tener que llamar a todos los ministros, para discutir, hacer las preguntas».

Indicó que «precisamos organizar una bancada importante. Se va a negociar todo. No va a haber tregua en cuanto al trabajo parlamentario. Necesitamos una bancada de ‘recontra’ solidez. No se si puedo retirar del Parlamento a compañeros sólidos como Sánchez».

Topolansky manifestó: «Me pregunto sobre la derogación de inclusión financiera. ¿Donde se fundamenta la emergencia? Le voy a preguntar a la Ministra de Economía. 400 artículos es como una ley de presupuesto».

Consultada por los juicios contra el estado, particularmente con Aratirí, contó que «está prácticamente ganado. Se dicen muchas noticias a medias».

Siguiendo con las medidas a media y las fakenews, afirmó que «la campaña electoral estuvo plagada de noticias falsas. El otro día leía el diario El País, leía que a Pepe en Argentina le pidieron que se pusiera corbata, eso es todo mentira. No pasó. A la señora Rodríguez Larreta no le gusta y ponen todo eso».

Continuó asegurando, en cuanto a los medios de comunicación, que «no creo en los neutrales, no existe. Prefiero que la persona me diga abiertamente». Señaló que «El País apoyó la dictadura, no me llama la atención que haga oposición a un gobierno como nuestro pero tira un busca pie, pero le aclaro, a mi no se mueve un pelo con lo que dicen».

En cuanto al ajuste de estado que pretende llevar a cabo el próximo gobiern comentó que «el FONASA es caro. Gasté 60 millones de dólares en el BSE. ¿Arbeleche está dispuesta a gastar en un hospital 60 millones de USD? A mi me queda la duda».

Siguió expresando: «¿Dónde va a hacer el recorte Arbeleche? No me lo explico. Algo van a recortar. Quiero ver donde» .

Sobre la auto crítica del Frente Amplio, comentó que «estamos en el medio de un proceso electoral. Vamos a terminar la carrera y luego sacaremos las conclusiones. Sobre Martínez la decisión es de él. Acá lo principal es dar la lucha departamental y municipal lo mejor posible. Ese el objetivo».

Señaló que «el FA tiene el desafío de la unidad. Vamos a cumplir 49 años de llevar adelante una coalición, por eso no se cuanto va a demorar la coalición que armaron. Se juntaron 5 partidos para sacar a otro. No se como se van a arreglar esos ‘pingos’ en el ruedo».

En posible diferencia con la coalición, indicó que «salvo 3 leyes y no creo equivocarme, el FA siempre votó y encontró la modalidad de votar juntos. No se como van a hacer la coalición» y exclamó: «Hay que tener 50 en diputados y 16 en el senado. Y no hay Cristo que lo cambié».

En cuanto a los ministros que designó Luis Lacalle Pou, comentó que a «la mayoría no los conozco». En particular, señaló que se sorprendió con el puesto que tomó Jorge Larrañaga, «yo que Larrañaga hubiese hecho lo de Wilson y hubiese tomado Ganadería. Meterse en el Ministerio del Interior creo que es una jugada riesgosa. Ojalá le vaya bien», comentó.

Respecto a la reunión que tuvo con miembros del Mercosur, indicó que «era un escenario complicado. La mano izquierda levantada no fue casualidad». Explicó que «vino con nosotros Diego Escuder y entendíamos que era bueno que estuviera».

Contó que saludó a Bolsonaro al llegar, «Somos civilizados. Hablamos con todos los presidentes. Le dije a Macri la alegría va por barrios, los dos perdimos y se rió», manifestó.

En cuanto a la situación de Bolivia, expresó que «hicimos un planteo y quedamos en minoría». Agregó que «Uruguay sostiene que hubo un golpe de estado en Bolivia». Asimismo contó que «la canciller que me vino a saludar le dije que Uruguay podía estar dispuesto al diálogo».

En cuanto al cambio de gobierno en Argentina señaló que le dejaron un «regalito», «con el FMI, es el préstamo más grande de la historia. A Lagarde y la señora nueva las van a echar sino recuperan dinero. Tienen que renegociar. Argentina tiene que tomar medidas de emergencia. Hay un 40 por ciento de pobreza».

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