El futuro ministro de Educación fue consultado sobre la situación de su pareja, Maya Cikurel, quien fue detenida por Interpol por estar presuntamente vinculada a la causa Odebrecht.

“No voy a hacer declaraciones públicas porque dado el lugar que ocupo, cualquier cosa que diga puede ser interpretada como un intento de influencia sobre la justicia y nada está más lejos de mi intención” señaló.

Enseguida agregó “respeto el Estado de Derecho, respeto la división de poderes, respeto la Justicia independiente y lo último que haría en mi vida es tratar de influir o de algún modo molestar el funcionamiento de la Justicia. Lo mejor que puedo hacer en este momento es no decir nada, no da lugar a ninguna interpretación y dejar que los hechos sigan su curso”.

 

 

Da Silveira explicó “el Ministerio de Educación simplemente es una ventanilla por la que pasa el trámite, que el ministro de educación ni ve el expediente, que no tiene ninguna capacidad de influir en eso. Hoy no hay ningún pedido de extradición, en el caso que llegue, el ministro de Educación no tiene ninguna capacidad de influir en el proceso, no hay capacidad de influencia. Si llegara a darse un caso así, tomaría absolutamente todas las medidas para que quedara claro que no hay ninguna voluntad de incidencia aunque no la haya”.

Sobre el respaldo brindado por el presidente electo, Luis Lacalle Pou dijo que se lo tomó “con agradecimiento. Es una demostración de sensatez”. Pero reiteró “cualquier cosa que diga puede tomarse como un intento de influencia”.  Agregó que ha recibido “manifestaciones de apoyo que se cuenta de centenares, no solo del Partido Nacional, sino de la coalición y de parte de dirigentes del Frente Amplio”.

 

 

Foto: FocoUy / Gastón Britos