En su columna de género en De taquito a la mañana, la periodista Carolina Notalgiovanni abordó la realidad de los varones que deciden dejar de ejercer violencia.
«Una investigación revela que uno de los datos más importantes es si es posible o viable el cambio. Se llegó a la conclusión de que la violencia física fue lo primero que dejaron estos hombres que trataron su problema. Sin embargo, lo que persistió fue la violencia verbal y psicológica, aunque sí se constataron cambios que mejoraron la vida de las mujeres y sus hijos», confirmó Notalgiovanni.
«Si no hay voluntad no sirve de nada. Si la persona no quiere cambiar, no hay cambio», agregó.
«Es difícil que ciertos vínculos continúen, por más que el varón haga procesos y modifique su postura. La mujer ya tiene una carga muy importante. Cuando el nivel de daño es muy intenso, no es recomendable que esa pareja continúe», explicó la periodista.
«De hecho, en algunos casos se constata que si no se termina el vínculo, a la larga se puede volver a los hábitos anteriores y llegar al femicidio», concluyó.