El canciller dijo que “el mal llamado cóctel no es otra cosa que muchas horas de esfuerzo”.

El canciller Francisco Bustillo se reunió este viernes con la vicepresidenta Beatriz Argimón.

En ese marco el jerarca de esta dijo que en su función tendrá la “la procura de conseguir lo mejor para el país es fundamental procurar las buenas relaciones» y para ello es necesario vincularse de esta forma con los actores en juego”.

Al se consultado si como diplomático defiende que no se haya invitado a representantes de Cuba y Venezuela a la asunción de Lacalle Pou Bustillo señaló: “cuando en cinco años tenga que hacer las cartas de invitación te lo respondo” y confirmó que estará en funciones hasta que finalice la administración de Lacalle Pou.

En relación a la denominada “política cóctel” dijo: “Lo mal llamado cóctel son las horas que uno deja de estar con su familia. El mal llamado cóctel no es otra cosa que los almuerzos con distintos empresarios, distintos actores de la realidad nacional o en la realidad donde a uno le toca actuar”

«Creo que todos los aspectos técnicos que involucra la relación son fundamentales, y la Cancillería es la mejor multinacional que tiene el país. Pero el mal llamado cóctel es fundamental. Probablemente yo sea producto de ese mal llamado cóctel, que no es otra cosa que muchas horas de esfuerzo, muchas horas de almuerzo, de cena, de cafés y muchas horas de dejar a la familia de lado en procura de hacer la mejor tarea», agregó.

«Son los tantos esfuerzos que uno hace para desarrollar sus relaciones serias de dar a conocer el país, interactuar, intentar captar inversores extranjeros. Hay todo un trabajo que se da a través de la presencia de uno y la interacción con la otra parte, y eso se da precisamente con un café o un almuerzo con una persona. Las relaciones no se gestan de un día para el otro», concluyó.