La totalidad de los partidos de las Eliminatorias para el Mundial de Qatar 2022 deben disputarse sin público.

La Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) tendrá un lucro cesante que puede llegar a rondar los 9.000.000 de dólares si, como consecuencia del COVID-19, la totalidad de los partidos de las Eliminatorias para el Mundial de Qatar 2022 deben disputarse sin público.

La Conmebol aún no ha remitido a las asociaciones afiliadas al organismo continental el protocolo sanitario que regirá al menos para la doble fecha inicial de la ronda clasificatoria que se jugará entre los próximos 8 y 13 de octubre, pero Jorge Casales –integrante del Comité Ejecutivo de la AUF- confió a “La Oral Deportiva” que “la percepción que tenemos es que el sistema va a ser similar al impuesto para la Copa Libertadores”.

Según el dirigente, en esta oportunidad, si fuera con el marco habitual, la AUF podría percibir por la venta de entradas para los nueve encuentros que Uruguay jugará de local en el Centenario un promedio mínimo de US$ 600.000 por partido, lo que al cabo del torneo clasificatorio representaría un total de 5.400.000 dólares.

Sin embargo, esa suma puede aumentar considerablemente si la actuación de la selección celeste despierta un interés y una atracción como las que logró generar en la afición local durante el transcurso de las Eliminatorias para el Mundial de Rusia 2018.

En tal sentido, vale recordar que la recaudación por la venta de 50.413 entradas para el partido que Uruguay jugó el 31 de agosto de 2017 con Argentina en el Centenario llegó a $ 53.000.000, que a la cotización de la moneda en ese momento representaban 1.816.935 dólares; y que al cabo de las 15 fechas de esa última ronda de clasificación la AUF facturó por tal concepto un total de 9.200.000 dólares.

El cálculo de un lucro cesante por dicho monto es, obviamente, para el caso de que todas las fechas de las Eliminatorias del Mundial de Qatar 2022 deban disputarse sin público, lo quizá pueda cambiar en el transcurso del torneo si la situación provocada por la pandemia registra una mejoría que permita aplicar un protocolo sanitario menos riguroso.

“No es descartable la posibilidad de que para la doble fecha de noviembre, o tal vez más adelante, la Conmebol pueda llegar a habilitar el ingreso de un porcentaje limitado de público”, reflexionó a su vez Gastón Tealdi, vicepresidente del Comité Ejecutivo de la AUF, pero esa eventualidad igualmente no supondría un resarcimiento realmente significativo en el plano económico.

“Con el tema del distanciamiento social y todos los requisitos de control y de seguridad que exigiría el protocolo, tanto para adentro como afuera del estadio, para habilitar el ingreso de público, habría que montar el mismo espectáculo de siempre, pero con menos gente”, dijo el dirigente, explicando que de esa forma “se dispararían los costos”, para luego preguntarse: “¿A cuánto tendríamos que cobrar las entradas, vendiendo menos, pero teniendo casi los gastos de costumbre?”

Incluso, según pudo saber “La Oral Deportiva”, tanto en la AUF como a nivel de clubes hay dirigentes que ya han pensado en ese aspecto para el escenario del fútbol local “post pandemia”, porque cuando el Ministerio de Salud Pública autorice el ingreso de una determinada cantidad de gente a los partidos, en virtud de las normas que impondrá el distanciamiento social se podrá vender sólo un limitado número de entradas que no sobrepasará el 30% de la capacidad locativa de los estadios, lo que va a generar recaudaciones con las cuales será imposible cubrir los costos.