Al igual que Julio María Sanguinetti, el senador abandona su banca en una jornada especial.

Llegó el día. Los octagenarios José «Pepe» Mujica, y Julio María Sanguinetti, ambos expresidentes de la República e históricos líderes de sus respectivos partidos, decidieron abandonar sus bancas en el Senado por su avanzada edad y el riesgo a contraer el nuevo coronavirus.

Minutos antes de ingresar a la Cámara, Mujica recibió a periodistas y fotógrafos mientras disfrutaba de su última taza de té: una pausa en donde aprovechó para describir la agenda del Parlamento y decir se comprimió con la Ley de Urgente Consideración y con la Ley de Presupuesto Nacional, que ingresa a Senadores este martes.

Consultado por su continuidad en la vida política, el expresidente afirmó que seguirá ejerciendo hasta sus últimos días. «Mientras precise aire, voy a seguir en política. El homo sapiens es un ser gregario; no es como los pumas que pueden vivir en soledad. Hay conflicto, el papel de la política es amortiguar», reflexionó.

Sobre Sanguinetti, la otra figura que decidió dejar el Parlamento, Mujica destacó que el colorado es «un viejo luchador, importante», y recordó que «representa una parte importante de la opinión pública de este país». «Antes de las elecciones, conversando con él, le dije que no me resignaba a que el Partido Colorado desapareciera. Sobre todo el batllismo que tiene tanto que ver con la idiosincrasia promedio de los uruguayos», agregó.

Mujica en su despacho. Foto: Nahuel Marichal.

A pesar de abandonar el cuerpo legislativo, Mujica dijo que aún quedan pendientes en su trabajo como senador. «Hay un montón de proyectos impulsados que están… Siempre quedan cosas», dijo, y agregó que se siente responsable por la cantidad de personas en situación de pobreza.

En tanto, el senador del MPP también fue consultado acerca de su relación con el presidente Luis Lacalle Pou, con quien dijo no tener una buena relación. «No depende de mí; yo no tengo enemigos. Lo que pasa es que tengo una manera de ser que lo calienta y chau», concluyó.

Al momento de tomar la palabra, Mujica señaló que, a pesar de todos los desacuerdos que mantuvo con los diferentes senadores, no guarda ningún rencor con nadie. Finalizó su intervención con un consejo a los jóvenes: «le quiero transmitir a los jóvenes: hay que darle gracias a la vida, triunfar en la vida no es ganar. Triunfar en la vida es levantarse y volver a empezar cada vez que uno cae».