A pesar de que la autopsia no indicó una mala praxis, los fiscales investigan ahora negligencia médica o impericia siendo el especialista el principal sospechoso.

La muerte de Diego Maradona da un giro por estas horas ya que el juez de garantías de San Isidro, Orlando Díaz, a través de un exhorto, requirió a la Justicia porteña el allanamiento de la casa y el consultorio privado de Leopoldo Luciano Luque, neurocirujano, quien fue  el último médico personal del ídolo argentino.

Según informan los medios argentinos, las actuaciones se realizaron durante la mañana del domingo en el domicilio donde vive el profesional de 39 años, y en su consultorio privado.

La Justicia investiga bajo la sospecha de supuestas  irresponsabilidades en el cuidado de Maradona,  desde su internación en la clínica  de La Plata, desde  el 2 de noviembre para realizarse chequeos generales. Según indica Infobae, la sospecha ahora es de homicidio culposo y llega tras a las declaraciones testimoniales que ayer se le  tomaron a Dalma, Giannina y Jana, las tres hijas de Maradona.

Los investigadores, solicitaron la historia clínica, los detalles de su tratamiento y del postoperatorio, luego de haber sido intervenido por un hematoma subdural en su cabeza y de su cuadro de abstinencia. Se busca corroborar presunciones y las sospechas de sus hijas, saber qué medicamentos le recetaban. Varias dudas surgen luego del trágico desenlace como por ejemplo si ¿tenia realmente el alta médica? o ¿por que no contaba con un medico especializado las 24 horas?.