La agrupación buscar ser «gestor» de la reforma de la seguridad social y para eso presentarán candidatos en todos los órdenes.
El movimiento Un Solo Uruguay realizó un acto de forma virtual donde anunció que presentará candidatos a todos los órdenes en las elecciones del Banco de Previsión Social. Se cuestionó el alto costo del Estado y se lamentó que no se haya reducido la cantidad de ministerios, organismos y cargos políticos.
En la lectura de la proclama, Federico Holzmann informó que presentará candidatos a las elecciones del BPS en los tres órdenes, empresarios, trabajadores y jubilados para buscar «ser los gestores de la reforma que se viene en Seguridad Social, asegurando que los cambios votados en el Parlamento se plasmen en la realidad con los principios de Un Solo Uruguay».
Presentarán la candidatura de José Pereyra por los empresarios, de Luis Lisboa por los trabajadores y de Virgina Vaz por los jubilados. Pereyra es delegado a la mesa nacional del movimiento y presidente de la cámara empresarial de Maldonado. Lisboa es «trabajador del Interior de nuestro país, trabajador del banco de previsión social y un quijote que junto a los gremios que lo apoyaron y apoyan dio la pelea por su lugar en las elecciones pasadas del BPS» mientras que Vaz es «corazón y cerno de Un Solo Uruguay, quien no necesita más presentación que su nombre, que asegura una luchadora por nuestros principios desde el primer día» indicó Holzmann.
La proclama también apuntó a que el incremento del déficit fiscal lleva a «las empresas a basar su economía en el ahorro para subsistir y no en la apuesta a invertir y reinvertir para producir más y mejor». Señaló que el país perdió «la oportunidad de bajar el presupuesto sin desatender la emergencia social».
«Mientras circunstancias adversas ocasionadas por la pandemia obligaron a sectores enteros de la economía a bajar sus cortinas o a un aumento de la carga tributaria, como le sucedió al sector ganadero; sin embargo los que tienen la vaca atada siguieron ajenos a las dificultades e inclusive vimos como la gran expectativa de una reducción del abuso salario de los jerarcas de las dependencias estatales, fue una muestra de compresión y solidaridad que solo duró dos meses».
Foto: Gastón Britos / FocoUy