El partido presentó un paquete de medidas para atender los impactos de la pandemia.
El Partido Independiente (PI) presentó una batería de medidas que elevó al Poder Ejecutivo, para atender los impactos de la pandemia. Los principales planteos son dar un subsidio de 4.200 pesos por tres meses a unos 300.000 trabajadores informales que se quedaron sin ingresos y exonerar totalmente los aportes patronales de las micro y pequeñas empresas (mipes) del sector comercio e industria. El Partido entiende que las medidas deben ser “examinadas en el marco de los objetivos macroeconómicos explicitados en la reciente ley de Presupuesto” y “sin comprometer los objetivos del resultado fiscal estructural”.
Sobre el subsidios mensuales de $ 4.200, a través de las tarjetas del Ministerio de Desarrollo Social (Mides), para los cerca de 300 mil trabajadores informales, el costo total, según los cálculos del partido, sería de US$ 90 millones.
El documento difundido propone crear un “Registro de Trabajadores Informales” para ofrecer a esa población «un apoyo para la formalización que puede canalizarse por la vía de la formación de microempresarios o de trabajadores monotributistas, incorporándolos en programas de asistencia y capacitación o integrándolos a bolsas de trabajo».
Implica “trabajar en forma conjunta entre el Ministerio de Trabajo y Seguridad Social y el MIDES la base de datos de los beneficiarios referidos a los efectos de su depuración, sistematización y adecuación, con el objetivo de institucionalizar el citado Registro que, al margen de la pandemia, será útil para definir programas de apoyo a la formalización y vinculación permanente, así como para su incorporación a otros programas sociales del Estado (por ejemplo Asignaciones Familiares o actualización de las Tarjetas de Uruguay Social)».
En relación a los estímulos fiscales, se plantea la «revisión tributaria de las aportaciones fictas de IRAE para Micro y Pequeñas Empresas (Mipes)». Se propone que «la renta ficta se calcule en forma progresiva sobre los excedentes de ingresos que superen cada tramo». «Si los ingresos son equivalentes a UI 3.800.000, hasta 2.000.000 aportaría sobre la base de una renta ficta de 13.2%, el excedente de UI 1.000.000 lo haría en base a una renta ficta de 36%, y finalmente, el excedente de UI 800.000 aportaría sobre la base de una renta ficta del 48%», indica la propuesta.
Por otra parte, se sugiere ampliar el régimen de tarifas residenciales de los Servicios Públicos a las Micro y Pequeñas Empresas (Mipes) «por el término de un año». También durante un año, el partido propone reducir a cero los aportes patronales en las Mipes pertenecientes al sector de Industria y Comercio. El monto estimado de reducción de ingresos al Banco de Previsión Social es de unos U$S 50 millones.
Se plantea un régimen de facilidades para las deudas generadas con el BPS y DGI hasta el 31 de diciembre de 2020, a efectos de regularizar los adeudos. «Para aquellos contribuyentes que no registraren adeudos en los doce meses anteriores al 1° de marzo de 2020, las deudas generadas durante la pandemia serán convertidas a Unidades Indexadas (UI), sin interés, si se abonan en un máximo de 12 cuotas mensuales iguales y consecutivas».
Asimismo se sugiere analizar la «viabilidad» de una «licencia fiscal» –cese temporario de aportes a BPS y DGI– para «aquellos emprendimientos que tuvieron nula o escasa actividad desde el inicio de la pandemia». «Dicha licencia podría regir desde el 13 de marzo de 2020 hasta la finalización de la pandemia, y supondría además que los trabajadores se mantendrían en seguro de desempleo durante todo el período», indica el documento.
Foto: Gastón Britos / FocoUy
