Hubo un incremento de 2124 casos con respecto a 2020. El 91% de los agresores son familiares directos.

En el marco del Día Mundial de Lucha contra la Violencia hacia Niñas, Niñas y Adolescentes, se presentaron los datos correspondientes a 2021 donde se detectaron y atendieron 7.035 situaciones de violencia hacia niños, niñas y adolescentes (NNA), lo que implica un promedio de 19 situaciones por día y un incremento de 2124 casos con respecto a 2020.

Según el informe del Sistema Integral de Protección a la Infancia y Adolescencia contra la Violencia (SIPIAV), los tipos de violencia son variados; el mayor porcentaje corresponde a maltrato emocional (37%), seguido de abuso sexual (20%), maltrato físico (17%) y negligencia (24%). Es de destacar que todas las situaciones de violencia implican maltrato emocional, y por allí principalmente ingresan al sistema.

La violencia se produce, en su mayor medida, en dos principales franjas etarias: de 6 a 12 años (37%) y de 13 a 17 años (35%). Si discriminamos por sexo, existe una mayor detección de maltrato en el sexo femenino: 3 de cada 4 situaciones de violencia corresponden al sexo femenino. De acuerdo al informe, “esta tendencia se mantiene presente, confirmando que la variable sexo es un indicador de vulnerabilidad en las situaciones de violencia y colocando a niñas y adolescentes mujeres en un lugar de mayor probabilidad de sufrir maltrato y/o abuso”.

El presidente del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), Pablo Abdala, dijo en rueda de prensa que “el fenómeno de la violencia hacia los niños no para de crecer”. Pero señaló que “hay algo positivo que es que el sistema está detectando más casos que antes, pero no quita que la violencia crezca”.

Informó que “más del 90% de los casos se da en el ámbito familiar, por eso es de muy difícil detección. Más de 65% de los niños no toman consciencia ni visibilizan la violencia que hacia ellos se ejerce”. En ese sentido dijo que “lo que preocupa no es solo las cifras en si misma, sino el crecimiento exponencial de los datos, porque se da con las cifras registradas y las que no están, hay un gran subregistro”.

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