En Hamburgo un hombre de 35 años, reconocido por las autoridades policiales como Phillipp F., entró a una iglesia de los Testigos de Jehová y comenzó a disparar ocasionando siete fallecidos, entre ellas una embarazada de siete meses. El victimario luego se quitó la vida en un hecho que por el momento no ha sido catalogado con motivaciones terroristas. La investigación indica que no tenía antecedentes penales, pero se presume que tenía trastornos psiquiátricos.
El hecho ocurrió a las nueve de la noche de Alemania del pasado jueves, es decir a las cinco de la tarde hora uruguaya del mismo día. El victimario anteriormente había pertenecido a la religión de los Testigos de Jehová y según supo la cadena internacional Deutsche Welle mantenía odio hacia las religiones, especialmente la que había profesado. El joven había abandonado la iglesia hace un año y medio en malos términos.
Foto: Web de la ciudad de Hamburgo