Escuche aquí el informe completo Pablo Fernandez, Alfiles y Peones:
Para el triunfo de las elecciones es clave el peso de las estructuras partidarias, del financiamiento y el dinero que obtienen los comandos electorales, del desempeño de los candidatos, obviamente, pero sin duda que uno de los puntos centrales está en la ingeniería electoral que desarrolla cada partido político.
En Alfiles y peones, Pablo Fernández analiza la discusión interna que la coalición de izquierda está llevando adelante para definir en el próximo congreso que realizará a fin de año donde resolverá si mantiene el lema Frente Amplio o elige un nuevo “paraguas electoral” para competir en el proceso electoral.
¿Esto es nuevo? No. Hasta las elecciones de 1989 la coalición de izquierdas compitió bajo el lema Frente Amplio, con los candidatos Liber Seregni como presidente y Danilo Astori como vice. Tabaré Vázquez en esa ocasión fue candidato a la intendencia y ganó.
Pero para las elecciones de 1994 el Frente decide innovar y cambia de lema. Allí lograron una alianza con blancos y batllistas donde llega desde Cerro Largo la figura de Rodolfo Nin Novoa para completar la fórmula con Tabaré Vázquez y conformarán el nuevo lema: Encuentro Progresista – Frente Amplio.
En 1999 se estrena el sistema de elecciones internas, mantienen el mismo lema, pero en 2004 el Frente vuelve a cambiar de lema tras la incorporación del Nuevo Espacio, de Rafael Michelini que antes era un partido político que competía de forma independiente. Se crea el Encuentro Progresista-Frente Amplio-Nueva Mayoría.
Era tan largo el nombre del partido, y ya en realidad para los votantes era simplemente Frente Amplio que para las elecciones de 2009, 2014 y 2019 la coalición de izquierda volvió al lema simple Frente Amplio.
Ahora el planteo de volver a un paraguas más amplio que permita incorporar nuevos ingresos está encima de la mesa. Eso será definido y aprobado, si es que se logran los votos en el Congreso del Frente Amplio a fin de año. Tienen tiempo para presentar el nuevo partido político si es que lo consiguen antes del 11 de enero del 2024, que es la fecha en que la Corte Electoral cierra el plazo para la inscripción de partidos que quieran competir en el proceso electoral nacional.
¿Qué se necesita del Congreso? Un consenso muy amplio. Lograr la aprobación de cuatro quintos de los votantes presentes, lo que se sabe que por la estructura del Congreso del FA es muy, muy complicado. Allí los representantes de las bases, y el Partido Comunista tienen un peso muy significativo y justamente no son quienes hoy tengan el especial interés de abrir el paraguas.
¿Quienes podrían entrar? Fernando Amado, Franzini Batlle, Richard Read, La Patriada, si es que le incomodara el lema FA. Lo cierto es que no hay una figura tan central como aquella de Nin.
¿Quienes se oponen? Los socialistas y los comunistas no lo ven con especial simpatía. Necesitan una elección corta. “Los bolches somos una roca: tenemos 60 mil votos y esos pesan. Si es una elección corta esos votos pesan más”
Pero si abren el paraguas, esos votos pesan menos. Allí la disyuntiva de si pensar en el objetivo general o el objetivo personal.