El episodio tuvo lugar el pasado miércoles en horas de la tarde en las afueras de la ciudad de Córdoba. El delincuente de 43 años quedó enganchado de un testículo en la reja de la entrada de un domicilio mientras trataba de escapar. 

“Quedó literalmente sentado e incrustado en las rejas. Se puede observar a simple vista que la reja tiene una terminación en punta y ha quedado allí con la lesión consiguiente”, dijo Roberto Villada, comisario de la jurisdicción, en declaraciones recogidas por Cadena 3.

Vecinos de la zona alertaron a los efectivos policiales de la situación. Acto seguido, se trasladaron hasta el lugar de los hechos y dieron con el ladrón, que se encontraba en estado de embriaguez y tenía una de las puntas de la reja del portón clavada en su cuerpo.

 

Foto: Cadena 3