Israel amaneció el sábado siendo objeto de violentos ataques por tierra y aire, desde la Franja de Gaza, por parte del grupo islamista Hamás. Ante esa situación el Estado israelí declaró la «alerta de guerra» y el gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu pidió el confinamiento de los habitantes de las ciudades cercanas a Gaza.

Se trata de un ataque sin precedente en décadas del grupo islamista contra territorio israelí. Las últimas informaciones oficiales hasta el momento informaron que hay 40 muertos y cientos de heridos. El contraataque israelí ha dejado cerca de 200 muertos y 1600 heridos en la franja de Gaza.

«Estamos en guerra» ha declarado el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, después del ataque. Después de eso, el Ejército israelí se declaró estado de guerra y puso en marcha la operación «Espadas de Hierro». Los aviones israelíes bombardearon instalaciones de Hamás en la Franja de Gaza. 

El Ejército de Israel ha confirmado finalmente que el movimiento islamista palestino Hamás tomó como rehenes a civiles y militares durante la incursión de sus milicias en las zonas del sur del país fronterizas con la Franja de Gaza.