En un estadio Gran Parque Central con muy buen marco de público, Nacional y River Plate igualaron 2 a 2 por la 4ª fecha de Fase de Grupos.

Los goles millonarios en la primera mitad llegaron por intermedio de Miguel Borja y Facundo Colidio. Los gritos tricolores en el complemento fueron gracias a un doblete de Gonzalo Carneiro (el primero de penal).

Dos caras muy diferentes del equipo uruguayo. En los 45′ iniciales el equipo estuvo mal armado, no había contención y tampoco balance. Lucas Sanabria corría solo en el mediocampo. El millonario jugó cómodo aprovechando estas ventajas y lastimó.

En la segunda mitad hubo dos momentos bien importantes, los cambios de Álvaro Recoba (remendando errores) dieron resultado. Hablamos de Christian Oliva, Diego Zabala y Diego Polenta. El otro momento fue el borbollón, después de esa acción el albo creció y los argentinos bajaron.

Además, Martín Demichelis (una vez más) hizo cambios difíciles de entender y Nacional lo agradeció.
Más allá de las virtudes en lo futbolístico, lo más rescatable de esta noche fue la muestra de caracter y la rebeldía.

Teniendo en cuenta el empate entre Táchira y Libertad, el resultado no termina siendo malo para los bolsos.
Álvaro Recoba deberá aprender de los errores y potenciar lo bueno del segundo tiempo.

Mal arbitraje de Anderson Daronco, debió expulsar a varios en esos encontronazos. En esas acciones salió ganando el equipo uruguayo, que la sacó baratísima.

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