La Asamblea de Clubes reunida en la Asociación Uruguaya de Fútbol decidió suspender en forma indefinida el inicio del Campeonato Uruguayo que en principio estaba previsto para el 6 de agosto.
No poder adquirir por razones económicas las cámaras de reconocimiento facial que exige el Ministerio del Interior y la imposibilidad de contar con la presencia policial dentro del perímetro de juego en los partidos de alto riesgo hizo que los dirigentes del fútbol tomarán esta determinación.
Además se determinó que la misma se mantenga en sesión permanente en pos de ir calibrando los pasos a dar y en la búsqueda de rápidas soluciones que reestablezcan la tranquilidad.
Una vez finalizada la Asamblea, Wilmar Valdez presidente de la AUF en conferencia de prensa informó lo sucedido: «se suspendió el inicio en forma indefinida y la resolución implica la declaración de sesión permanente de la misma para avanzar en todas las negociaciones y reuniones que tendremos por delante».
Consultado sobre si se trató alguna fecha tentativa para ese arranque demorado contó que «no hay fecha alguna y nos dimos espacios para gestiones, negociaciones alternativas, como la entrevista que tendré con el presidente de FIFA el 3 de agosto en Río de Janeiro. Tuvimos el apoyo unánime de los clubes para seguir trabajando en pos de llegar a una solución».
Además expresó que «se barajaron muchas posibilidades. Lo que si hay que destacar es que la Asamblea nos mandató para agotar todas las instancias y ratificó la voluntad de encontrar un camino para lograr la instalación de este sistema de cámaras que nos pidió el Ministerio».
Valdez explicó además que se manejo una propuesta alternativa: «la solución intermedia en esta primera etapa seria la instalación de las cámaras en el Estadio Centenario y que allí se jueguen, de forma normal, todos los partidos considerados de alto riesgo. De lo contrario jugarlos en las canchas habituales pero con medidas especiales, como por ejemplo bajar la cantidad de entradas en venta y bajar el riesgo inminentes con acciones a realizar».
Por último consultado sobre de que forma se puede encontrar el dinero para costear la compra de las cámaras de reconocimiento facial argumentó: «se habló largamente el tema económico, de cómo financiarlas, el endeudamiento que tiene la AUF. Es lo que tenemos que ver ahora con mucha tranquilidad».