Tal como lo había anunciado el ministro de Economía, Danilo Astori, la inflación volvió a bajar y se ubicó en 8,90% en los últimos 12 meses. En setiembre el Índice de Precios del Consumo aumentó un 0,25%, producto del encarecimiento de restaurantes y hoteles, prendas de vestir y calzado y salud.
La inflación dio un respiro al Gobierno y se alejó definitivamente de los dos dígitos. En julio la anualizada fue de 10,05%, en agosto bajó a 9,38% y en setiembre volvió a bajar a 8,90%, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística.
El informe revela que el Índice de Precios al Consumo en setiembre se incrementó 0,25% en relación al mes anterior, mientras que la variación acumulada en los primeros nueve meses del año fue de 8,39%.
Rubros como transporte y salud se incrementaron por encima del 1 %, mientras que alimentos y bebidas registró un incremento de sus precios de 0,86 %.
Las legumbres y hortalizas bajaron su precio un 3,67%, fundamentalmente por bajas en acelgas (-13,19%), espinacas (-18,03%), lechugas (-7,97%), zapallitos (-24,34%), zanahorias (-6,40%), morrones (-28,76%) y papas (-3,82%) y subas en tomates (6,89%), cebollas (3,10%), zapallos (18,49%) y boniatos (18,44%). Se registra además una baja en frutillas (- 5,13%).
En cuanto al rubro vivienda, el aumento de 0,31% se explica principalmente por alquiler de vivienda principal (0,55%) e impuestos domiciliarios (2,35%). Se registra además una baja en gas por red (-3,22%).
El informe subraya que el rubro alimentos y bebidas no alcohólicas presentó una pequeña incidencia a la baja de la inflación de 0,03, mientras que el sector restoranes y hoteles incidió 0,9% en el aumento del indicador.
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