La regla se convierte en ocasiones en un incómodo invitado al que no esperas o que no quieres que aparezca en determinados momentos. Quien más y quien menos ha sufrido alguna vez su presencia en el momento más inesperado: unas vacaciones, una cita importante, un viaje romántico, sexo previsto desde hace tiempo… La menstruación se ve afectada por diversos aspectos colaterales que puede hacer fluctuar las fechas de nuestro ciclo menstrual. Y también nosotras podemos modificar esas fechas para adelantar la regla y evitar que se produzca en un momento que nos pueda resultar inoportuno.

El aparato reproductor femenino está ‘trabajando’ de forma continuada durante todo el mes, aunque nosotras apenas lo percibamos, salvo cuando baja la regla. Es por ello que si os vais a plantear adelantar la regla lo mejor es planificarlo con algo de tiempo, no pensarlo dos días antes. Lo más adecuado es hacer cálculos de cuando está prevista la menstruación. En el caso de que el periodo no sea extremadamente puntual también hay que tenerlo en cuenta a la hora de echar números.

Hay que saber que esto no es una ciencia exacta. El cuerpo de cada mujer es diferente y los hay que reaccionan bien a los intentos de adelantar la regla y otros que no responden de ninguna de las maneras. Tampoco todos los remedios sirven para todas las mujeres con la misma eficacia. Hay menstruaciones más regulares que otras y a algunas les afectan más determinados factores externos.

CONSECUENCIAS DE ADELANTAR LA REGLA

Existen remedios caseros y también algunos químicos que pueden ayudarnos a adelantar la regla. De igual de las maneras no es recomendable realizar esta práctica con asiduidad, por muy natural que sea lo que nos tomemos para ello. El ciclo menstrual de la mujer es un complicado engranaje que puede sufrir las consecuencias de las alternaciones provocadas por nosotras mismas.

De forma general se puede decir que adelantar la regla no es bueno para nuestro cuerpo. Tampoco resulta especialmente dañino, pero precisamente por ello no se puede abusar. No es recomendable hacerlo cada vez que va a bajar la menstruación y tengas planeado tener sexo, por ejemplo. Es algo que a la larga acabará dañando a nuestro cuerpo.