El estudio publicado en The Independent, reveló que el arsénico existente en el arroz, solamente se elimina si lo remojas, por lo que debes dejar el arroz en agua durante toda una noche y después lavarlo y enjuagarlo hasta que el agua salga limpia.
El investigador Andy Mharg, experto en Ciencias Biológicas de la Universidad Queens de Belfast, decidió experimentar 3 tipos de preparación con la intención de analizar los niveles de arsénico en los granos de arroz; el primer método consistió en utilizar dos partes de agua y una de arroz, aunque el agua se evaporó durante la cocción, se encontró que de esta manera se conservaba la mayor parte del arsénico.
En segundo lugar, Mharg intentó preparar el arroz con cinco partes de agua a una de arroz, así los niveles del veneno se redujeron a la mitad, pero seguían existiendo.
Y por último, el investigador dejó el arroz en agua durante toda la noche, siendo este método el más efectivo al reducir hasta en un 80% la presencia de arsénico.