Stephen Paddock vivía en Las Vegas, cerca de la frontera con Arizona, y aunque hasta el momento su nombre había pasado inadvertido para muchos, lo cierto es que ahora comenzó a estar en boca de todos por ser el autor del ataque ocurrido el domingo en aquella ciudad durante un festival de música que dejó 58 muertos y más de 500 heridos.

Aunque se cree que Paddock se quitó la vida después del ataque, su mujer, Mary Lou Danley, fue detenida en las últimas horas por ser considerada «una persona de interés» en la causa. Justamente fue arrestada en la vivienda que compartía con el atacante, en la cual se encontró una gran cantidad de armas.

Según explicó el juez del Condado de Clarck, Joseph Lombardo, los oficiales determinaron que los disparos se produjeron desde una habitación ubicada en el piso 32 del complejo Mandalay Bay, donde además de ubicar al atacante, encontraron una gran cantidad de armas.

La realidad, es que esta no es la primera vez que el apellido Paddock aparece en los medios de comunicación por un acto delictivo, ya que el padre de Stephen, Benjamin Paddock, fue uno de los hombres más buscados de Estados Unidos.

En 1968, Benjamin Paddock huyó de la prisión de Texas, a la cual había ingresado por estar sentenciado a 20 años de reclusión por cometer un asalto en el Banco Nacional de Valley en Phoenix en 1960 y desde entonces, se convirtió en uno de los 10 hombres más buscados del FBI.

Además, según confirmó el portal «The independent», los investigadores de esa época aseguraban en los diarios que el criminal era un psicópata, con tendencias suicidas, sumamente peligroso para él mismo y los demás por portar armas usualmente.

Lo cierto, es que diez años después de haberse fugado, la policía descubrió que había estado oculto en Oregon bajo el nombre de BruceWarner Erickson, y que en el lugar, trabaja en un bingo. Sus vecinos de aquel entonces salieron a decir que nunca sospecharon del hombre, y que no podían creer que estuviera involucrado en un crimen.