En promedio anual, unos 1.700 adolescentes de entre 15 y 17 años están en los registros del banco de actividades laborales, cifra que en verano asciende a 2.000 personas; el 72 % se desempeña en el sector de industria y comercio y el 15 %, en el rural. Pero si se toman los datos laborales de las personas de entre 15 y 18 años, los puestos cotizantes aumentan a 10.000 al año.
La directora del Instituto del Niño y Adolescente del Uruguay (INAU), Marisa Lindner, calificó al carné como un avance sustantivo, porque esta herramienta “representa garantías de derechos de niños y adolescentes”. Sostuvo que “es muy relevante que el trabajo no se contraponga en el avance de la trayectoria educativa de niños y adolescentes”.
Por su parte, el ministro Murro enfatizó los esfuerzos del país para promover el trabajo y el estudio de los adolescentes con el permiso de este y su familia, en el marco de las normas y derechos laborales más avanzados. En Latinoamérica, Uruguay es el único país con un organismo en el que se analiza el trabajo infantil con participación del Estado, las cámaras empresariales, el PIT-CNT y la sociedad civil, enfatizó Murro sobre el Comité para la Erradicación del Trabajo Infantil (CETI).
Las autoridades participaron en la Torre Ejecutiva de la campaña titulada “Si vas a trabajar, que sea con tu permiso”. La conferencia también contó con la participación de la directora ejecutiva de la Agencia Uruguaya de Cooperación Internacional (AUCI), Andrea Vignolo, y la responsable de Programas de la Cooperación Española en Montevideo, Blanca Rodríguez.