La noche del martes en el Teatro de Verano arrancó con las actuaciones de Niños Nacientes, Aliados, Los Buscadores y Clown’s
A primera hora, la agrupación de lubolos que nació como un hobby con ensayos en el patio de una casa, cumplió su sueño de presentarse arriba de las tablas del Ramón Collazo.
Una vez cumplido el objetivo de llegar al Carnaval de las Promesas, contaron su historia a todos los presentes con el disfrute de los niños a flor de piel, algo que prioriza la comparsa en esta primera incursión en el concurso.
El segundo turno fue para los humoristas Aliados que, mediante el hilo conductor de la niña Renata y su abuela, defendió con todas sus fuerzas a la juguetería que quería ser comprada para instalar otro negocio.
Para desgracia de los frustrados compradores, la juguetería contaba con un secreto: una caja que, al ser abierta por la niña, da vida a los juguetes que la ayudarán a conservar ese tan preciado local con el humor como principal herramienta.
En tercer lugar, pisó las tablas la revista Los Simuladores representados por un gran grupo de bebés rebeldes que se plantaron decididos a poner fin a todas las cosas que no les gustan.
Con muchas situaciones de humor, donde casi siempre los familiares adultos son embaucados por sus encantos y estrategias, tres pequeños muestran cómo se ve el mundo desde la perspectiva de los más chiquitos frente a las cosas cotidianas.
Cuando parecía que el tiempo amenazaba con fuertes relámpagos, llegaron los parodistas Clown’s con toda la fuerza para contar la historia de Troya.
La historia comenzó con la resurrección de Aquiles que, con la participación de todo el conjunto, recreó la obra de Homero con muchísimas situaciones de humor y un gran despliegue escénico.