Fuentes Confiables dialogó con el Director por la oposición en ANCAP, Diego Labat sobre el aumento de los combustibles. 

«No voté el aumento» dijo. «Tenemos que separar lo que es el corto plazo donde cuando uno compara de enero a julio el crudo ha subido bastante y todo indica que va a seguir subiendo. Con esa referencia el ajuste está dentro de los valores razonables. Pienso que hay una alta carga fiscal que tiene la nafta que se lleva la mitad de lo que se paga en el surtidor. Creo que el Gobierno tendría que tratar de mitigar con alguna reducción de impuestos. Tenemos precios de combustibles muy altos. No podemos seguir siempre discutiendo en la cortita, si está bien o no calculada la paramétrica, sino que tenemos que tener precios acordes con la región. Estamos hablando que 23 pesos es el costo en el precio de la nafta en el surtidor».

Aclaró que «»es un alivio para el sector agropecuario que no se aumente el precio del gasoil, pero el aumento que no se da en el gasoil termina afectando el aumento de las naftas. Una parte de la población termina subsidiando a otra».

Consultado sobre la posible ventaja de importar combustibles, afirmó que «la importación no resuelve todos los problemas. Es un razonamiento simplista. Creo que hay poner en debate el tema de la importación. No es la solución a todo pero es un elemento que puede ayudar para que los precios sigan bajando. La URSEA calcula lo que saldría en forma teórica importar y esos cálculos dan en el entorno de U$s 400 millones. Ajustando los cálculos se pueden llegar a U$S 200. Pero no se puede de un día para el otro desarmar la refinería.»

Sobre los Biocombustibles afirmó que «los biocombustibles tienen una consideración medioambiental, pero si solo se mira la parte económica se termina hoy por hoy encareciendo el precio final de los combustibles. Es otro tema que hay que poner arriba de la mesa».

Consultado en cuanto a las medidas de reestructura que se han tomado, opinó que «lo que se hizo a principio del 2016 mejoró notariamente la situación financiera de ANCAP. Estaba con un balance casi en quiebra. Creo que todavía hay que bajar la deuda de ANCAP y sigue siendo una empresa con una rentabilidad demasiado alta».

Aquí la entrevista completa con Aldo Silva: