Una llamada anónima advirtió al servicio 9-1-1 de un posible copamiento en proceso y rápidamente se montó un operativo que permitió la detención de todos los responsables que podrían ser los autores de robo a cajero automático.
Los hechos
Sobre las 22:00, aproximadamente, del pasado viernes, se recibe una llamada advirtiendo sobre una persona que fue bajada de un vehículo de forma violenta y es ingresada a una finca contra su voluntad. El relato presenta todos los indicios de una privación de libertad lo que desata la aplicación de los protocolos de respuesta para ese tipo de emergencia.
La víctima -dueña de una barbería próxima a inaugurar- fue trasladado desde el local hasta su domicilio en un coche Nissan de color negro, en el que viajaban dos personas más; en el lugar esperaba un Chevrolet Corsa negro del cual descienden tres personas. En momentos que descienden para ingresar al domicilio de la víctima, acertó pasar otra persona que también fue ingresada de forma violenta al lugar.
Adentro de la casa estaba la novia del propietario, quien fue sorprendida por los copadores.
A partir de la llamada al 9-1-1, la Policía monta un importante operativo que involucra a personal de Investigaciones de la Zona III de la Jefatura de Montevideo, efectivos de la Guardia Republicana; del Grupo de Reserva Táctica (GRT); de las Unidades de Respuesta de la Policía de Montevideo (URPM), y motos del Grupo de Intervención Rápida (GIR), los que rodean la finca asegurando el lugar donde se estaba produciendo el evento.
Los delincuentes intentan huir -con sus rostros cubiertos- por las azoteas, donde ya se encontraban policías apostados, debiendo desistir del intento. Posteriormente emplean una coartada vistiéndose con ropas de las víctimas e instruyendo a estas para que relaten que «son amigos de la casa y que ya se retiran».
Al cabo de unos 10 minutos se abre la puerta de la finca de la que salen 8 personas, (7 masculinos y 1 femenina), quienes esgrimen aquel argumento.
Los efectivos no creen el relato y los reducen para proceder a su identificación y revista, momento que
la joven aprovecha para advertir a los efectivos policiales que lo relatado es falso y que ellos eran víctimas de un intento de copamiento por parte de esos delincuentes.
Posteriormente, y una vez reducidos los sospechosos, se inspecciona la finca encontrándose chalecos antibala; armas, baterías, grampas «miguelito», tanques de acetileno y billetes entintados. Elementos que hacen suponer que se trataría de los autores del robo a cajero automático, lo que también se investiga por la Fiscalía de 5º turno a cargo del Dr. Pérez.
Tras la revista e identificación, quedaron 7 detenidos que vienen siendo indagados por la Fiscalía actuante, entre ellos estaría la persona obligada a ingresar contra su voluntad y un amigo del dueño de la finca.
Incatuaciones
- – 6 armas de fuego, 5 tipo pistola y un revólver, en diferentes puntos de la finca (una de las pistolas se encontraba denunciada por un FFPP en el año 2015, y otra por un particular en el año 2016);
- – cargadores de pistolas,
- – 3 chalecos antibalas, (uno de ellos denunciado por un FFPP desde el año 2018),
- – munición,
- – pasa montañas,
- – guantes,
- – dispositivos y baterías que pudieran ser utilizados para explotar cajeros automáticos,
- – un balde de plástico con implementos metálicos (miguelitos),
- – billetes entintados,
- – libretas de propiedad de al menos 2 vehículos,
- – un par de chapas matrículas denunciadas,
- – 1 vehículo Nissan, negro
- – 1 vehículo Chevrolet Corsa, negro
Todo lo cual viene siendo periciado por Policía Científica habiéndose dado cuenta también al Servicio de Material y Armamento del Ministerio de Defensa, para el caso de las armas.
Los detenidos serán conducidos a declarar a Fiscalía en las próximas horas.