El 29 de octubre de 1975 había sido detenido en la vía pública en la capital del país, en horas de la noche, durante la dictadura militar (1973 – 1985).

El uruguayo Eduardo Bleier Horovitz había nacido en 1927, era odontólogo, casado y con cuatro hijos. Su actividad de militancia se enmarcó en el Partido Comunista (PCU) y en el Frente Amplio (FA). Miembro del Comité Central, Secretario Departamental de Finanzas (PCU).

Fue llevado a un centro clandestino de detención, ubicado en la Rambla República de México y luego al Servicio de Material y Armamento, situado a los fondos del Batallón de Infantería Nº 13. Según el informe de la Comisión para la Paz, Bleier fue “intensa y continuamente torturado” en ambos lugares.

Presuntamente, en diciembre de 1975, es internado en el Hospital Central de las Fuerzas Armadas a consecuencia de las torturas recibidas. Siendo posteriormente trasladado nuevamente al “300 Carlos”, donde es visto por ultima vez.

Los datos de su fallecimiento no son precisos, pero presume que fue entre el 1º y el 5 de julio de 1976.

En la tarde del martes 27 de agosto de este año se informó sobre el hallazgo de restos óseos en el Batallón de Infantería Blindado Nº 13, próximo al arroyo.

Se trata de una zona cautelada -que no se puede excavar ni realizar movimientos de tierra- judicialmente desde el año 2011 y ya se trabajaba en el lugar. Los antropólogos trabajaron durante toda la noche ese día para extraer los restos humanos.

El Batallón N.° 13, ubicado entre Avenida de Instrucciones y Casavalle, funcionó durante la dictadura como un centro clandestino de reclusión y torturas, conocido como “Infierno Grande”. Fue creado el 22 de noviembre de 1904. Allí fueron detenidas y torturadas varias personas.