La fiscal Brenda Puppo explicó su accionar al procesar al implicado por el robo al Banco República de Punta de Rieles.
Explicó que «las cámaras permitieron identificar el auto» y reafirmó que «el implicado ya estaba identificado desde el robo a la joyería». Ante esto señaló que «la orden de detención del hombre ya estaba pedida desde abril de este año».
Consultada por si integra una banda delictiva, indicó que no se conoce aún, pero sí que participó con una persona más en el robo a la joyería y con cuatro más en el robo del banco.
Contó que al auto en el que lo detuvieron «apareció el arma, miguelitos y un cronómetro (lo tenía colgado en el cuello cuando cometió la rapiña), además tenía un mapa de la zona escrito a mano».
Puppo explicó que en su accionar «es importante recabar toda la evidencia antes de hablar con la defensa del imputado (…) lo que se encontró en el auto fue muy importante, además las cámaras fueron fundamentales».
En cuanto a los bienes robados en la joyería, como el dinero del banco, «se da por perdido» ya que «es muy dificil rastrearlo».
Respecto al indagado, expresó que «generalmente no colaboran en la declaración, tienen un código». Manifestó que los ocho años de prisión, «confío que es una buena condena para ser un proceso abreviado» y agregó que «la pena que hubiera solicitado en un juicio oral sería tres años más».
Explicó que el detenido es «un hombre serio. No es una persona marginal, es una persona que tiene sus estudios, una persona ‘común y corriente'». Contó que «cuando fue detenido exhibió un documento de una persona extranjera fallecida».