La extradición fue suspendida porque la pena se vio interrumpida tras la fuga. En nuestro país no se pueden llevar adelante procesos en rebeldía.

Rocco Morabito estuvo detenido en la excárcel central, -ubicada en Carlos Quijano y San José- a la espera de ser extraditado a Italia. Fue detenido y procesado por delitos cometidos en septiembre de 2017. Luego se lo trasladó al Penal de Libertad donde al cumplir la pena, quedó a disposición de la Justicia por razones administrativas.

Ese motivo implicó que esta persona, quien figuraba con otra identidad en Uruguay y se hacía pasar por un empresario del sector agrícola, no pudiera estar en contacto con penados, formalizados o procesados.

En esta línea, se dispuso que el lugar apropiado para que cumpla su privación de libertad es la excárcel Central, donde a partir de marzo, el edificio sufrirá modificaciones y pasará a manos de Secundaria.

Sin registros fílmicos.

El 24 de junio de 2019, al momento de la fuga de los reclusos, las cámaras de seguridad de la dependencia del Ministerio del Interior no funcionaban. Días atrás, la Justicia había solicitado el material grabado por estos dispositivos, por lo que fue retirado el DVR con las imágenes.

Al respecto se inició una investigación porque se había presentado una denuncia por hechos de corrupción en la excárcel Central. No hay pruebas con imagen de la fuga de estas personas porque la resolución fiscal de retirar los registros las cámaras no lo permitió.

Privación de libertad “bastante light”.

En 2018, el Ministerio del Interior tomó conocimiento de un escrito que advertía sobre una posible fuga de Morabito. También ocurrió otra de estas instancias recientemente.

En ambos casos “se tomaron medidas” y “fueron eficientes”, aseguró en ese entonces en rueda de prensa, el ministro Bonomi. Aunque reconoció que el criminal italiano había hecho declaraciones a su entorno diario, en las que expresaba que las condiciones de privación de libertad “eran bastante light”.

Se pensó en trasladar al recluso a Punta de Rieles pero no se concretó. Sino que se decidió reforzar la seguridad de las instalaciones céntricas con personal de Guardia Republicana.

En julio de 2019, el ministro de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), Jorge Chediak, aseguró que la fuga del italiano Rocco Morabito afecta la imagen internacional del Uruguay y deja “mal parado” al país. Según indicaron fuentes del Ministerio del Interior a 970 Noticias, seis policías fueron sumariados por la fuga del mafioso italiano.

Cercanos.

Uno de los reclusos que fugó junto a Rocco Morabito fue extraditado a Brasil. Se trata de Matías Acosta González que fugó de la excárcel Central el 23 de junio de 2019 junto al italiano Rocco Morabito y otros dos presos más.

También ruso fue enviado a prisión por encubrimiento en fuga de Morabito y otros dos quedaron en libertad. No se descarta que el imputado haya participado en un presunto traslado del italiano Rocco Morabito a Lavalleja.

En julio, tras un operativo enmarcado en la búsqueda de Rocco Morabito, detuvieron a tres personas en una pizzería Eatalian Style de Punta Carretas.

Ese mismo mes, el ministro del Interior, Eduardo Bonomi, fue llamado a sala por el senador del Partido Nacional (PN), Javier García, para que brinde información acerca de la fuga de excárcel Central de varios reclusos. Entre ellos, Rocco Morabito, quien estaba en proceso de extradición.