Diego Aguirre, el entrenador que llegaría a Peñarol si Juan Pedro Damiani hubiese sido electo como presidente en las elecciones del sábado pasado, dialogó con La Oral Deportiva desde Qatar y manifestó que «estoy preparando la vuelta a Uruguay que será en los próximos días».
El entrenador renunció hace algunas semanas al equipo Al Rayyan, pero finalmente los socios eligieron a Ignacio Ruglio y ahora su destino es incierto… «vuelvo para estar con la familia por supuesto, además del tema de Peñarol, sabemos que pasaron cosas, no pasó lo que imaginaba y eso trastocó los planes, en principio volviendo a Uruguay por unos días de vacaciones, renuncié al contrato acá pero aún me quedan unos días para poder viajar».
Consultado por la posibilidad de llegar al equipo Aurinegro a pesar de no estar Damiani, explicó que «la verdad es que no he tenido ningún contacto, marqué mi posición de ir con Juan Pedro (Damiani) por varias razones como se sabe, tengo una relación muy buena con el desde hace años, por todas las experiencias juntos y porque también apoyaba mi proyecto y mis ideas, lo que me hacía sentir feliz de poder volver».
«Lo único que puedo decir es que mi vuelta estaba confirmada con la presencia de Juan Pedro en la presidencia» «traté de mantenerme ajeno al tema político, y no dejé ningún mensaje al hincha, simplemente que si las cosas pasaban de una manera mi vuelta al club estaba asegurada pero los acontecimientos fueron distintos, el socio eligió otra opción que es válido», agregó.
Las elecciones cambiaron los planes… «mi intención de volver estaba, quede triste porque lo daba por hecho de que iba a ganar Juan Pedro pero se mostró la voluntad de la gente, ahora desearle lo mejor al nuevo presidente».
«No me gusta hablar de supuestos porque el volvería implica muchas cosas, mi vuelta estaba garantizada porque estaba asociada a un proyecto deportivo, a tener la libertad de gestión y dar lineamientos al club en general, me generaba mucha motivación y esas cosas estaban vinculadas a la llegada de Damiani, ahora las reglas de juego cambiaron y no he tenido ningún tipo de contacto con otras personas», argumentó sobre su vuelta.
Además, expresó que «fue un impacto y me sentí bastante mal, no lo puedo negar, me dio cierta frustración porque hacía dos meses estaba trabajando en ese proyecto y esa ilusión que me generaba volver a Peñarol».
Ignacio Ruglio hizo público que iba a hablar con Aguirre para ver si estaba disponible e ir a buscarlo, sobre estas declaraciones manifestó que «hay que ver si hace la llamada y que contenido tiene la llamada, que no sea para decir bueno cumplí y ya está, que no sea por compromiso porque no lo hay».
En cuanto a su equipo de trabajo comentó que «tengo una amistad ya con el Profe Piñatares desde la época de la selección juvenil, hace cinco años sumamos a Juan Verzeri y estamos juntos para el siguiente proyecto sea cual sea, trabajamos en equipo».
Pablo Bengoechea como referente y Gabriel Cedrés como gerente deportivo, así lo quiso Ruglio, «no quiero hablar de supuestos ni de algo que no se si será así o no, mi máximo respeto al nuevo presidente, a Pablo (Bengoechea) y a la gente que se sume porque se que van a ayudar y mucho, obviamente que el presidente tiene la libertad de poner a la gente que crea idónea y no tengo dudas de que puedan hacer un buen trabajo».
Para finalizar, el nombre de Aguirre siempre se pone sobre la mesa cuando se habla de sustitutos para Oscar Washington Tabárez quien ha declarado que las Eliminatorias son «mi último baile», sobre esto expresó que «cada vez más mis objetivos son cortos porque uno nunca sabe lo que va a pasar y proyectarse a varios años es algo que estoy tratando de no hacer, la realidad es que me sentía que ya estaba en Peñarol y hoy no estoy, renuncié a mi club por esa posibilidad y hoy el socio quiso otra opción, me enfoco en lo inmediato y no de aquí a dos años, el futuro dirá».
Fuente: La Oral Deportiva
