El científico Carlos Vera trajo a los oyentes de Punto de Encuentro la paradoja de Papá Noel para analizar este 24 de diciembre. Como todos sabemos, Papá Noel vuela alrededor del mundo en su trineo en una noche. La ciencia, para entender las cosas hace un estudio por partes. Vera lo dividió en las siguientes.

Vuela en trineo tirado por renos

Ningún reno vuela, no obstante eso, hay 300 mil especies que vuelan aunque la mayoría sean insectos. No se puede descartar la existencia del reno volador.

Recorrido

Hay aproximadamente 1200 millones de niños en el mundo (menos de 14 años). Eso significa unos tres niños y medio por hogar con 92 millones de hogares con niños en el mundo. Papá Noel dispone 24 horas para entregar los regalos, por lo que debería hacer 822 visitas por segundo, suponiendo que en cada uno hay por lo menos un niño que se portó bien y Papá Noel se detenga en su casa. Tiene una milésima de segundo para estacionar, bajarse del trineo, bajar por la chimenea, dejar el regalo y volver. Cada una de esas 92 millones de paradas están uniformemente sobre la tierra -lo cual es falso, pero sirve para hacer el cálculo- hay una casa cada 12 cuadras. El recorrido es de 110 millones kilómetros -la mitad de la distancia entre la tierra y el sol-. No para ni para ir al baño y se mueve a 1000 km por segundo -3000 veces más rápido que la velocidad del sonido-.

Los renos corren a una velocidad pico de 24 kilómetros por hora. En la comparación surge la paradoja por la inconsistencia.

Los regalos

Suponiendo que a cada niño se le lleve un solo regalo y este sea de tamaño mediano -1 kg o 900 gramos- el trineo debe soportar unas 321 mil toneladas sin contar a Papá Noel. Un reno convencional puede transportar 150 kg, los renos de Papá Noel transportan 35 millones de kg cada uno.

Este trineo que soporta unas 321 mil toneladas viajando a unos 1000 kilómetros por segundo, tiene una resistencia aerodinámica tan grande que genera un calentamiento de los renos similar al que sufre una nave espacial en su reingreso a la atmósfera terrestre. El trineo absorbe un trillón de calorías por segundo (cada reno). Se incinerarían casi al instante las primeras dos parejas de renos y se generaría una onda sonora ensordecedora por haber roto la barrera del sonido. El trineo se evaporaría en las primeras 4 milésimas de segundo del vuelo. Papá Noel sufriría una fuerza de arrastre de 17 mil 500 veces mayor a la de la propia gravedad. Sentiría que se pega al asiento con una fuerza de 200 millones de kilos.

Escuche la columna de Carlos Vera en Punto de Encuentro