En cuanto al reinicio de la presencialidad  consideraron  que deberá ser “planificado, gradual y seguro”.

La Federación Uruguaya de Magisterio – Trabajadores de Educación Primaria (Fum-Tep) consideró en un comunicado que la decisión tomada por el gobierno de suspender las clases presenciales en todos los niveles de enseñanza » atenta contra el derecho a la educación». Agregaron que esta medida, además, «desliga al Estado de una de sus tareas centrales y transfiere esta responsabilidad a la familias, además segmenta el sistema educativo, no resuelve el problema de la movilidad, crea confusión en las comunidades educativas y deja a las y los funcionarios y docentes de Primaria solos, sosteniéndolas escuelas con escasos recursos y ningún apoyo».

Por otra parte consideran  que tanto el gobierno como las autoridades de la educación «son responsables de no haber planificado con el tiempo suficiente las condiciones necesarias para el comienzo de clases en tiempo de pandemia».

«Tampoco se adoptaron criterios y protocolos claros para atender las situaciones que se generan a diario con casos positivos o cuarentenas de docentes, auxiliares, niños y niñas».

Exigieron que se garantice la alimentación escolar  y consideraron necesario que se den paquetes de datos tanto a los docentes como a los estudiantes «para continuar con la modalidad virtual garantizando el acceso a internet sin costos».

Por otra parte exigen  «garantías de protección de salud para directores y auxiliares de las escuelas que luego de organizar e higienizar los locales deben mantenerse en sus hogares».

En cuanto al reinicio de la presencialidad  consideraron  que deberá ser “planificado, gradual y seguro” y  complementar la realidad sanitaria de cada departamento.

Foto: Maria Ines Hiriart/ FocoUy