El nuevo entrenador de Nacional, Martín Ligüera analizó tras ser confirmado en el cargo para el Torneo Clausura, cuales eran los puntos «débiles» en los que era necesario echar mano en el plantel, con la anuencia del presidente José Decurnex, y tras el mismo, dio el visto bueno a la negociación para el regreso de Diego Polenta.

Evidentemente, no es el único punto que el flamante técnico dio en su informe, pero si uno importante. El excapitán llegaría en caso de darse el pase, para ser dupla con Guzmán Corujo en un puesto donde rotaron futbolistas como Renzo Orihuela, Mathías Laborda y con más continuidad, Nicolás Marichal, pero se consideró que existen algunos inconvenientes.

El defensor está sin club desde el 1º de julio de este año aunque mantiene un tema crucial con Olimpia de Paraguay, dueño de su ficha. No es considerado parte del plantel que dirige el uruguayo Sergio Orteman, de hecho, no juega desde el 6 de mayo cuando disputó 18 minutos ante Inter en la goleada recibida 6-1.

Pero a esto hay que agregarle que desde julio, Polenta mantiene un juicio vigente en FIFA por salarios impagos de parte del club paraguayo. Mientras el mismo dure, esto puede imposibilitar de jugar al zaguero en Nacional.