La banda delinquía en todo el territorio nacional.
Operación “Migues” desarticula banda dedicada al hurto, tráfico y comercio ilícito de piezas de vehículos. Las actividades delictivas de este grupo se realizaban en todo el territorio nacional, salvo las dedicadas al desguace y venta de partes de auto que se desarrollaban en Montevideo y Canelones.
A raíz de esto, el pasado lunes 30 de agosto se realizaron siete allanamientos en distintas partes de la zona metropolitana y San Jacinto (Canelones), deteniendo a cinco personas. A su vez se citó a una sexta persona a declarar.
Culminadas las instancias judiciales, se condenó a H.G.P.L. de 32 años y a Jonathan Nicolás García García de 27 años, poseedor de dos antecedentes, como autores penalmente responsables de un delito de asociación para delinquir agravado por tener por objeto la receptación de efectos provenientes de delito en reiteración real con reiterados delitos de receptación, a título de dolo directo en calidad de autores, a la pena de 22 meses de prisión.
En cuanto a G.P.P.L. de 34 años se lo condenó “como autor penalmente responsable de un delito de asociación para delinquir agravado por tener por objeto la receptación de efectos provenientes de delito en reiteración real, con reiterados delitos de receptación agravada, a título de dolo directo en calidad de autor, a la pena de 22 meses de prisión, que se cumplirán en régimen de libertad a prueba.»
Respecto a Orosmán Rosi Paraduja Lima de 43 años, poseedor de cuatro antecedentes, se lo condenó “como autor penalmente responsables de un delito de asociación para delinquir agravado por tener por objeto la receptación de efectos provenientes de delito en reiteración real con reiterados delitos de receptación , a título de dolo directo en calidad de autor, a la pena de 22 meses de prisión”.
En cuanto a J.A.P.D. de 43 años se lo condenó “como autor penalmente responsable de reiterados delitos de receptación especialmente agravados por haberse recibido los efectos para su venta, a la pena de 18 meses de libertad a prueba”.
Respecto a C.W.P.G. de 60 años fue condenado “como autor penalmente responsable de reiterados delitos de receptación especialmente agravados por haberse recibido los efectos para su venta, a la pena de 18 meses de libertad a prueba.
Por esta operación aún se encuentran personas requeridas.