Quedó inaugurada la nueva sede del Consulado General de Uruguay en San Pablo, ubicada en la Avenida Paulista, la más famosa de la ciudad. El Consulado asiste a unos 30.000 uruguayos residentes en los Estados de San Pablo, Mato Grosso y Paraná. Además trabaja en la promoción de exportaciones del Uruguay a San Pablo, el fomento del turismo y la captación de inversiones, mediante un diálogo directo con las instituciones, cámaras y asociaciones de Uruguay.
El consulado es de gran importancia para nuestro país ya que Brasil es nuestro segundo socio comercial y San Pablo es el estado con poder adquisitivo más alto del país y el estado que aporta más al PBI de Brasil y cuenta con un mercado de consumo muy atractivo para Uruguay. Los vínculos comerciales por lo tanto son fundamentales para Uruguay, entre las acciones de promoción, se viene realizando especial énfasis en las posibilidades conjuntas entre Uruguay y San Pablo en materia de tecnología.
En su columna en Punto de Encuentro, la corresponsal de Brasil, Laura Olivera, contó que del evento participó el ministro de Industria Energía y Minería, Omar Paganini, que viajó a Brasil para reunirse con su par, ya que se está proyectando un acuerdo de exportación de energía, tras las sequías que se registraron en ese país. «Brasil busca un acuerdo para asegurarse el suministro de energía desde Uruguay pero pide un precio menor para la compra, por la crisis económica», indicó.
Además de la presencia del ministro Paganini, el evento contó el embajador de Uruguay en Brasília, Guillermo Valles, la Cónsul General de la República de Uruguay en San Pablo, Marta Echarte Baraibar, Affonso Massot, representante del gobernador João Doria y el embajador, Fernando de Mello Barreto, Secretario adjunto de la Intendencia de la ciudad paulista.
En otro orden, Olivera se refirió al escenario político que atraviesa Brasil, donde las últimas encuestas de intención de voto señalan que Luiz Inácio Lula da Silva podría ganar en primera vuelta en las elecciones el próximo año. «Lo dan mucho más arriba que Bolsonaro, más del 40% y Bolsonaro con 22%, muy por detrás las otras opciones, hay una gran diferencia. Hay un gran descontento por la participación de Lula da Silva en la cumbre del Mercosur, ha generado muchas tensiones políticas», indicó. Agregó que «hay varios puntos de tensión», por lo cual se realizará la cumbre de forma virtual.
Escuche la columna completa de Laura Olivera en Punto de Encuentro: