El entrenador de Peñarol, Mauricio Larriera, habló en conferencia de prensa tras el encuentro que le permitió a su equipo, obtener la primera victoria, por 2-1 en la Copa Libertadores, frente a Olimpia y explicó no sólo los argumentos, sino la gestión del plantel y el entender la exigencia de la gente.
El floridense sostuvo que «fueron dos tiempos diferentes, hasta con cambio de la estructura de juego porque sabíamos que Olimpia jugaba bien y manejaba mucho la posesión. Intentamos sorprender, gestionando también las cargas de los jugadores, quedarnos con alguna carta en la manga para el segundo tiempo. No nos encontramos en el primer tiempo y la responsabilidad es del entrenador».
Larriera explicó que la utilización de la línea de tres, ya era algo que venía palpitando de hace tiempo. «Hace tiempo que vengo con la idea de formar una línea de tres pero no quise pecar de irresponsable. Siempre me encargo de todo, principalmente de lo malo, después de lo bueno se encargan los futbolistas que entrenan siempre con la misma energía, que nos sacaron campeones, y muchas veces de los pelos porque tienen mucha jerarquía«.
En la misma línea, destacó que «las decisiones que uno toma son relacionadas a lo intuitivo, quisimos sorprender. No quise que saliera en ningún tipo de noticia porque estamos acostumbrados en mala forma, a dar información a los rivales y eso me desagrada. Fue una decisión arriesgada pero de la que estaba seguro. En Peñarol desde que decidí quedarme a dirigir la Copa después de ser campeón cuando el 99% de los entrenadores se van es parte de la valentía y discernimiento que no siempre gana la razón sobre el corazón».
Durante el desarrollo de ese primer tiempo y al final del propio, se dio un ida y vuelta por algunos comentarios de la gente, disgustada sobre el planteamiento del equipo. Larriera explicó que «se trata de un tema de sinergias. Yo no escucho específicamente lo que se habla ni tampoco miro, si murmullos pero me enfoco en lo que pasa adentro de la cancha. Se dio un tema de emociones«.
Por otra parte, marcó que luego de la charla en el entretiempo, «volvimos a nuestra estructura con la característica de equipo que me representa mucho para el segundo. A veces en la Libertadores el estilo queda un poco de lado y hay que ser pragmático».