Manifestantes rompieron el vidrio de la camioneta que trasladaba a Robert Silva tras finalizar la charla que las autoridades tuvieron con vecinos del barrio por la instalación de la reforma educativa.

Tras los incidentes que se desarrollaron este jueves en el Centro Cultural del Cerro tras la reunión del presidente del Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de la Educación Pública (Anep), Robert Silva, la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria del Uruguay (Fenapes) emitió un comunicado vía Twitter donde repudian «enérgicamente cualquier desborde violento que empañe el legítimo derecho de estudiantes, docentes y ciudadanos en general a manifestarse». Asimismo, expresaron que rechazan «intentos de adjudicar a la federación y a otras organizaciones, hechos aislados que no los representan». Por otra, distintos actores políticos del oficialismo y oposición se expresaron al respecto en redes sociales.

Las agresiones a Silva surgen con motivo de la reforma educativa que el Gobierno intentará llevar a cabo en 2023. El jerarca se reunió con vecinos y algunos representantes del gremio de docentes y estudiantes -luego que se les fuera impedido el ingreso al centro- para intercambiar respecto a los lineamientos del proyecto.

El presidente de la República, Luis Lacalle Pou respaldó a Silva citando su publicación en Twitter y destacó «el esfuerzo» que está haciendo por los estudiantes en mejorar la calidad de la educación.

El intendente de Canelones, Yamandú Orsi también mostró su solidaridad con el presidente de Anep afirmando que el debate por cualquier tema, «no justifica jamás la agresión» y llamó a «bajar la pelota».

En la misma linea, la vicepresidenta de la República, Beatriz Argimón escribió que «la pelea por una mejor educación, nunca puede ser la violencia» y subrayó que «seguirán avanzando por una reforma de la educación».

Desde las filas del Frente Amplio, el senador por el sector Fuerza Renovadora, Mario Bergara «condena la violencia proviniente de pequeños grupos» y asevera que «no es de esa manera en que los pueblos se manifiestan».

El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres consideró como una «cobarde agresión» la que sufrió Silva y se dirigió a los «intolerantes y autoritarios» afirmando que la transformación educativa «no se va a detener».

Desde la cartera del Ministerio de Educación y Cultura, su responsable, Pablo da Silveira expresó que «esto no es el Uruguay que queremos» y que «no se dejarán intimidar».

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