La Fiscalía General de la Nación (FGN) archivó la denuncia de la fiscal Gabriela Fossati contra su colega Fernando Romano, por «violencia de género». El hecho ocurrió en marzo cuando Fossati estuvo de licencia médica y Romano la subrogó en el caso Astesiano, pero a su regreso, discutieron en su despacho.

De acuerdo a la resolución, se trató de una «discusión puntual de naturaleza estrictamente laboral, que no se corresponde con la condición de mujer de uno de ellos».

El informe a su vez señala que los testimonios de otras fiscales, citadas por Fossati en su denuncia, “descartan de plano haber sido víctimas de violencia basada en género». «En definitiva, los relatos vertidos por los testigos propuestos por la Dra. Fossati no permiten conmover ni enervar de modo alguno lo oportunamente informado en los Dictámenes 26/2023 y 36/2023 de este departamento», indica la resolución.

Tras esa decisión, la fiscal expresó en su cuenta de Twitter: “Me entero por un periodista del resultado de una investigación, en el que varias mujeres declararon ser insultadas por Romano. Menos mal que no hay filtraciones desde FGN. La violencia perece que preocupa según quien sea el agresor y quien el agredido. Por suerte pronto me voy”, en relación a que, según anunció en setiembre renunciará.

Enseguida agregó otro tweet donde agradeció a quienes le enviaron la resolución: “Vamos bien si a esto se lo califica como «pelea entre pares». De los otros testimonios ni una referencia. En mi casa me enseñaron que esto es violencia”.