A veces, el arte suele pensarse en cuadros, esculturas, libros y teatro pero, ¿Qué pasa con los textiles? ¿Cómo han evolucionado las técnicas tradicionales del tejido? A partir del 15 de setiembre a las 18 horas y hasta el 9 de noviembre, el Museo de Arte Precolombino e Indígena (MAPI) inaugurará Illariykuna en Uruguay. Esta muestra que habla de las «fibras de un sol rectangular» contará con más de veinte piezas textiles interactivas que combinan tradición y tecnologías contemporáneas.

Para conocer más, Nadie Se Atreve recibió en RecomendArte a las responsables del proyecto: la artista boliviana, Aruma y a la curadora chilena, Valentina Montero que profundizaron en la investigación realizada en la práctica artística y el aprendizaje con maestras tejedoras de los Andes que llevó más de dos décadas. Si bien esta exhibición se mostró previamente en el Museo Nacional de Bellas Artes de Chile, la curaduría se renueva para adaptarla a las salas del MAPI.

Illariykuna en Uruguay

Aruma y Valentina Montero en Nadie Se Atreve presentando Illariykuna en Uruguay.

Durante la entrevista, Aruma dejó bien en claro que este trabajo en arte no se trata de «rescatar» o «recuperar» saberes ancestrales ya que para ella, el tejido es una «práctica viva». «Siempre digo que a las tejedoras nos gusta experimentar. Entonces, hago todo el proceso desde el hilado, el tejido, también las conexiones eléctricas y la programación de todas mis obras», señaló.

En «Illariykuna. Fibras de un sol rectangular», Aruma logró comprender la complejidad estética y técnica del telar tradicional estableciendo equivalencias con los sistemas propios de la informática y la electrónica. A la luz de las tradiciones indígenas, aborda las nociones de código y algoritmo, experimentando con el tejido desde su materialidad y poniendo atención a las reacciones eléctricas y químicas de sus procesos.

«El textil es tecnología, tiene los precedentes del lenguaje tecnológico que usamos ahora. Es una evolución de siglos que ha ido de la mano de la humanidad. Entonces, esta siempre ha recurrido a ella como un medio tecnológico. Desde las tablillas con códigos binarios de los egipcios como en el 4.000 a.C», explicó Aruma.

Por otra parte, Montero afirma que la exposición se busca darle pienso a los «problemas más conceptuales que el textil planteaba desde sus orígenes» y dejar de percibirlo como una simple prenda de vestir o una técnica para generar mantas, dado que desde hace años, profesionales que investigan el textil proponen que se lo entienda como un «ensamblaje socio-técnico complejo».

«Muchas veces tenía que ver con la representación del paisaje, pero también con problemáticas a nivel astronómico que es una hipótesis que se está trabajando desde hace algunos años ya respecto a cómo el telar estaría siendo una suerte de calendario que nos permitiría entender los ciclos solares», agregó la curadora chilena.

Mirá el programa completo de Nadie Se Atreve aquí:

Foto de portada: MAPI