Cada vez más los niños están enfermándose o sufriendo de situaciones que por su edad, no corresponderían: estrés, fatiga, gastritis y hasta ¡depresión!
El problema es, que en muchas ocasiones como padres y el ritmo acelerado que llevamos, no vemos que tienen los hijos hasta que el problema detona.
Estas señales te pueden indicar si tu hijo tiene depresión:
- Muestran desinterés por sus juegos preferidos, descubrir nuevas cosas y/o convivir con sus amigos.
- Dejan de convivir con familia o amigos; rechazan el contacto y prefieren pasar tiempo a solas muy seguido.
- Casi todo el tiempo se muestra triste, llora más fácilmente y sin razón aparente.
- Se frustra fácilmente y se muestra sensible ante el rechazo y/o fracaso.
- Y por lo mismo es más fácil que reaccione de manera agresiva.
- Se nota cansado o agotado con frecuencia y quiere dormir todo el tiempo.
- Está muy desconcentrado.
- Le cuesta trabajo dormir o empieza a presentar insomnio.
Si notas que presenta varias de estas señales es el momento de que busques un profesional; estar alerta a las señales puede ayudar a prevenir una situación desagradable.